EL CONSEJO DE SEGURIDAD DE NACIONES UNIDAS tiene previsto votar hoy lunes un proyecto de resolución que pide el retiro de la decisión del presidente estadunidense Donald Trump de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel, dijeron diplomáticos, una medida que probablemente enfrente el veto de Washington.
El texto de una página, redactado por la delegación egipcia, no menciona específicamente a Estados Unidos o Trump.
Los diplomáticos dicen que tiene un amplio respaldo entre los 15 miembros del consejo y que, a pesar de que difícilmente sea adoptado, la votación aislaría aún más a Trump en el tema.
Para ser aprobada, una resolución necesita nueve votos a favor y no debe recibir vetos por parte de Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Rusia o China.
Trump abruptamente revirtió décadas de política estadunidense este mes al reconocer a Jerusalén como la capital israelí, desatando la indignación de los palestinos. Trump también planea mudar la embajada estadunidense a Jerusalén desde Tel Aviv.
La embajadora estadounidense en la ONU, Nikki Haley, ha elogiado la decisión de Trump como un acto “justo y correcto”.
La misión estadounidense en Naciones Unidas no estaba inmediatamente disponible para comentar el asunto.
Ministros árabes de relaciones exteriores acordaron buscar una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la cuestión.
El texto “lamenta profundamente las decisiones recientes concernientes al estatus de Jerusalén”. “Cualquier decisión y acción que pretendan haber alterado el carácter, estatus o la composición demográfica de la Ciudad Santa de Jerusalén, no tendrán efectos legales, son nulas y deben ser rescindidas en cumplimiento de las resoluciones relevantes del Consejo de Seguridad”, afirma.
El proyecto también pide a todos los países que se abstengan de establecer misiones diplomáticas en Jerusalén.
Israel considera a la ciudad como su capital eterna e indivisible y quiere que todas las embajadas estén ubicadas allí.
EU, SOCIEDAD DESIGUAL
En días pasados el relator especial de la ONU sonre pobreza extrema y derechos humanos Philip Alston señaló que la administración de Donald Trump en Estados Unidos aún no cumple un año, pero los estragos sociales de sus políticas ya están en la puerta: los recortes “drásticos” al gasto social, sumados a la reforma fiscal que beneficiará a los más ricos, generarán “la sociedad más desigual del mundo”.
Al concluir una visita de dos semanas en el país más rico del mundo, el relator realizó un diagnóstico aterrador sobre la realidad estadounidense, lejano al mítico “sueño americano”.
Entre otros, señaló la brutalidad del sistema hacia los pobres, denunció el racismo institucional y la violencia contra los consumidores de drogas, e incluso planteó que la democracia estadounidense –que tantos presumen– se encuentra “socavada”.
En EU, 40 millones de personas viven en la pobreza –entre ellos una cuarta parte de los jóvenes–, un número creciente de ciudadanos cae en pobreza extrema y más de medio millón de personas vive en la calle.
Texto y fotografía: Agencias
