La exlideresa del SNTE aún es procesada por desviar recursos procedentes de los aportes sindicales de los maestros, por un monto superior a 2 mil millones de pesos.
LA EX LIDERESA MAGISTERIAL Elba Esther Gordillo Morales salió la madrugada de ayer sábado, aproximadamente a las 2:30 horas, de la clínica ubicada en Avenia de las Palmas donde se encontraba, para continuar el arresto domiciliario en un departamento de su propiedad en la calle de Galileo, en Polanco, a cuatro años y 10 meses de que la líder sindical fue detenida en febrero de 2013, acusada de delitos como defraudación fiscal, delincuencia organizada y lavado de dinero por un monto superior a 2 mil millones de pesos.
Gordillo Morales, quien salió en una ambulancia de la clínica, sólo esperaba que se emitiera un acuerdo del Juzgado Sexto de Distrito de Procesos Penales Federales, en donde está sujeta a proceso, informó su abogado Marco Antonio del Toro.
La exlideresa llegó a su domicilio luego del desistimiento de la Procuraduría General de la República (PGR) de una apelación que interpuso contra un tribunal federal que autorizaba la prisión domiciliaria.
El 23 de febrero se giró orden de aprehensión contra Elba Esther Gordillo, luego de que se detectaran operaciones inusuales con recursos del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
El procurador General de la República, Jesús Murillo, informó posteriormente que la Unidad de Inteligencia Financiera de Secretaría de Hacienda y Crédito Público detectó que de 2008 a 2011, la lideresa magisterial uso recursos del sindicato para el pago de pilotos, cirugías estéticas, hospitales, avión y dos casas.
El 26 de febrero del 2013, Gordillo fue detenida por la Policía Federal en el aeropuerto de Toluca por los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita y desvío de dinero.
Hace dos años y medio los abogados de Elba Esther Gordillo iniciaron la batalla legal para obtener el beneficio de la prisión domiciliaria.
La primera respuesta de los jueces en agosto de 2015 fue negarle ese beneficio por dos razones: Porque no se podía garantizar que ella no se pudiera escapar puesto que tenía altos recursos para hacerlo.
Que la maestra no tenía 70 años de edad cuando fue detenida y por lo tanto no cumplía con el requisito de la edad para el beneficio.
Esto llevó a los abogados a interponer un amparo en septiembre de 2015, el cual llegó hasta un tribunal colegiado.
La batalla legal en 2016 siguió, para entonces, la maestra ya tenía más de 70 años de edad y se encontraba hospitalizada en un sanatorio de la Colonia Roma, bajo la custodia de elementos del sistema penitenciario de la Ciudad de México.
En febrero de 2017, el quinto tribunal colegiado de la Ciudad de México determinó que la Elba Esther Gordillo sí cumplía con los requisitos para la prisión domiciliaria que marcan las leyes penales y de derechos humanos. Además de que hicieron consideraciones sobre su estado de salud.
Texto y foto: El Universal
