El pleno de la Cámara de Diputados aprobó el pasado jueves 15 de febrero modificaciones al segundo párrafo del artículo 280 de la Ley General de Salud, para que durante la emisión de las normas oficiales mexicanas de protección para el proceso, uso y aplicación de los plaguicidas se considere la prohibición progresiva de plaguicidas altamente peligrosos y se transite hacia la utilización de sustancias naturales.
De acuerdo con declaraciones de Lucely Alpizar Carrillo, diputada federal por Yucatán, esta reforma nace a partir de la preocupación por el incremento en las enfermedades cancerígenas, que según diversos estudios internacionales, son atribuibles al uso y contacto con esos productos, pues en su composición se incluyen químicos altamente cancerígenos.
La legisladora yucateca, y también química farmacéutica, señaló que con esta modificación sólo los plaguicidas y herbicidas hechos con sustancias naturales podrán ser usados, hecho que beneficiará no sólo la salud pública, sino la sustentabilidad en la producción de la tierra, y con ello la alimentación de todas y todos.
Asimismo, recalcó que en breve se trabajará por ampliar los efectos de esta reforma sobre el uso de químicos nocivos en la industria textil, pues estos han afectado los mantos freáticos y con ello la salud de los pobladores del estado.
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