DZITÁS. JONATHAN DAVID LARA HERNÁNDEZ, QUIEN LLEGÓ de Playa del Carmen a vivir en esta población hace más de tres años, fue ultimado de tres tiros, uno de ellos en la cabeza, a las puertas de su casa.
Cuando Lara Hernández llegó a este lugar rentó una casa y luego compró un terreno afuera de la población, donde inició la construcción de una casa. Lo que llamaba la atención de los vecinos eran las proporciones de la obra, pues desconocían a qué se dedicaba.
Al llegar en la tarde en su auto y al entrar al estacionamiento tres sujetos con el rostro cubierto con pasamontañas —que llegaron en un Tsuru de color oscuro— le habrían dado tres balazos, uno de ellos en la cabeza, a modo de tiro de gracia.
El cuerpo quedó tirado afuera del predio que se encuentra sobre la vía que conduce al municipio de Quintana Roo, Yucatán. Ante este hecho, en el estado se emitió la alerta roja y se implementaron operativos para dar con los autores de este crimen.
Por las características del caso, presuntamente se trató de un ajuste de cuentas del crimen organizado. Elementos de la Fiscalía se trasladaron al lugar para tomar nota y peritos de criminalística junto con el Semefo llegaron para el levantamiento del cadáver.
ENFERMERO
Aunque el juez Luis Edwin Mugarte Guerrero le dio muchas facilidades para que finalice su procedimiento por el delito de homicidio por culpa, el enfermero Ángel Antonio Tut Hau incumplió con el pago de $600 mil por la muerte de un niño de 23 días de nacido.
Ahora, la juez de control Blanca Beatriz Bonilla González revocó la suspensión condicional del proceso y de esta forma se reanudó, porque finalmente el vinculado no cumplió con una de las condiciones, que era pagar lo pactado en concepto de reparación del daño a las víctimas indirectas (progenitores) del bebé fallecido.
Varias veces el sujeto pidió prórroga para ampliar el plazo, ya que la suspensión condicional se aprobó el 15 de septiembre de 2016.
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