El presidente Andrés Manuel López Obrador y su esposa Beatriz Gutiérrez Müller encabezaron la ceremonia de izamiento de bandera a media asta en la plancha del Zócalo capitalino, para recordar a las víctimas de los sismos del 19 de septiembre de 1985 y 2017.
Después de izar la bandera en compañía de los mandos de las Fuerzas Armadas, Seguridad Pública, Gobernación, Protección Civil y la jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum, la banda de guerra del Ejército ejecutó el toque reglamentario del silencio, para después dejar a la banda de música de la Defensa Nacional entonar el Himno Nacional.
La ceremonia por el día de luto nacional duró apenas unos 10 minutos y estuvieron presentes miembros de protección civil, rescatistas y las Fuerzas Armadas.
Al caminar de regreso hacia Palacio Nacional, diversas personas se acercaron al presidente López Obrador para darle su respaldo y hacerle peticiones. Una mujer de edad avanzada cruzó la valla humana de marinos para entregarle un documento al presidente.
Más tarde, el Jefe del Ejecutivo mostró su solidaridad y ofreció un abrazo fraterno para todas las víctimas de los sismos de hace dos años y de 1985.
Veinticuatro soldados hicieron una fila hacia la calle 20 de noviembre y cargaron la bandera nacional enrollada, minutos antes de que López Obrador presionará un botón y la bandera comenzará a levantarse sobre el Zócalo a las 7:19 de la mañana, justo la hora en la que la tierra comenzó a temblar en 1985.
La banda de guerra del Ejército mexicano realizó un toque de silencio para recordar a las víctimas de los sismos de hace 34 años y dos años, en presencia de rescatistas, miembros de Protección Civil, la Marina, la Defensa y ciudadanos curiosos.
Después del himno nacional, el presidente, su esposa y su gabinete regresaron en silencio a Palacio Nacional.
Texto y foto: Agencias