Australia rendido a Serbia

Por: Santiago Pell

La ATP Cup, rotundo éxito como nuevo integrante del World Tour of Tennis. Todo el público australiano quedó admirado, se vio forzado a quitarse el sombrero y pararse de sus asientos para rendirse con aplausos ante menuda actuación de los jugadores…

Los partidos de dobles sirvieron para sumar puntos y especialmente para que en las rondas finales, en caso de que dos equipos llegasen a empatar, sería en este concepto de juego donde se definiría el marcador. Sin embargo, los singles fueron fundamentales y especialmente, muy intensos.

Para ejemplificar lo anterior, regreso a la semifinal entre Rusia y Serbia: la sorpresa del torneo, Dusan Lajovic (27) se enfrentó a Karen Kachanov (16). Encuentro reñido, pero terminó siendo el primero quien, con su cumplido revés a una mano, obtuvo resultado a favor 7/5 y 7/6.

El siguiente singles tuvo cabida entre el #2 del mundo, N. Djokovic y D. Medvedev. Sin duda alguna, el mejor match de toda la ATP Cup. Sus riñas siempre ofrecen espectáculo, calidad y sobretodo, rivalidad y admiración mutua. Factores que no dejaron de aparecer ahora, pues al volver a llegar a tres sets para concluir el choque, Nole con sus passing shots y pelotas profundas, jugó al límite para al final triunfar y tirarse al piso celebrando su victoria (6/1, 5/7 y 6/4).

La final fue Serbia – España. De manera fantasmagórica, sentí que Lajovic podría superar al #9 del mundo, R. Bautista Agut. De los mejores devolvedores del actual circuito que con su juego agresivo y profundo, a cualquiera le resultaría casi imposible el pelotear cómodamente y así fue… España sumó con devastador resultado (7/5 y 6/1).

Con la presión encima, el monstruo del tenis llegó a Sidney viéndose obligado a opacar a uno de sus némesis típicos en la historia: Rafael Nadal (1).

Jugando inteligente, Nole aprovechó oportunidades de drop shots para desbalancear al mallorquín y obtener breaks voleando con subidas a la red. El resultado fue 6/2, 7/6 y ahora todo acabaría en un doubles…

Lo único a resaltar del final de la copa es la fuerza de Novak Djokovic, después de haber acabado fulminado con Rafa, decidió jugar de nuevo. Retomó fuerzas (de ni me pregunten dónde) para salir con V. Troicki a la cancha y pelear contra una de las mejores parejas. La temida dupla española entre Feliciano López y Carreno Busta, apuesto a que extrañaron el extra que te ofrece Nadal como aliado, pues éstos no fueron suficientes ante los de Belgrado. ¡Marcador final: 6/3 – 6/4, Serbia campeón!

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.