Chivo mirando al precipicio

Por Rodrigo Aguilar

Apernas tres años y medio después y Chivas está de nuevo mirando el precipicio. Cuando Matías Almeyda llegó para dirigir al Rebaño el equipo estaba en zona de descenso, “vine a despertar al gigante dormido” dijo y así lo hizo. Hoy, las Chivas iniciarán el próximo torneo en los últimos lugares de la tabla porcentual.

De nueva cuenta, la no clasificación a la liguilla en los últimos torneos dejará de ser la prioridad para enfocarse en la salvación del equipo por mantener la categoría. Pero, independientemente de las particularidades del futbol mexicano los rojiblancos han sido víctimas de sus propios errores, empezando por su directiva.

La salida de Almeyda vino acompañada de la salida de jugadores importantes del plantel que logró el último campeonato en 2017. En un par de años, del equipo titular que logró el Campeonato sólo queda Alan Pulido. La crisis deportiva que atraviesa el club tapatío al parecer se deriva de la crisis financiera al interior y para hacerle frente han tenido que vender a sus mejores elementos como Rodolfo Pizarro, el “Gallito” Vázquez y Orbelín Pineda, entre otros.

Y dentro de esta espiral la ausencia de Jorge Vergara por motivos de salud también ha sido un factor y ha tenido que dejar las riendas en manos de su hijo Amaury, ajeno al medio futbolístico, y de su CEO comercial (no deportivo), José Luis Higuera.

El panorama en Chivas es malo, pero puede ser peor. El Club más popular de México debe reforzarse con jugadores mexicanos de primer nivel, con un director técnico a la altura de sus aspiraciones y con una directiva enfocada en poner el tema deportivo en el centro de las decisiones. Su enorme afición y su historia lo merecen. La mala noticia es que al parecer no han querido ver que seguir haciendo las mismas cosas y de la misma forma, solo les dará los mismos resultados.

 

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.