Comienza la transición

Por Juan Esteban Méndez

Ha empezado esa lenta transformación de adaptación por parte de las grandes productoras cinematográficas para hacer llegar sus grandes producciones a los consumidores, especialmente en este atípico año no solo para la industria, también para la humanidad.

La primera empresa que comenzó este giro fue Disney, que a pesar de ya haber estrenado la película de “Onward” rápidamente la posicionó en los sistemas de Streaming y la hizo accesible a muchas personas que aún estaban adaptándose a esta normalidad que tenemos.

Posteriormente a ello Warner Bros Animation estrenó Scoob! La película del importante personaje de Hanna-Barbera, de hecho había empezado una campaña de marketing muy importante en México y se vio interrumpida, salió de manera digital en Estados Unidos inclusive con la posibilidad de verla con el doblaje Mexicano, nuestro país no la pudo ver hasta los primeros días de septiembre en un estreno limitado en salas de cine (con todo y sana distancia)

Mulán es un ejemplo muy palpable de la situación y de cómo la industria no se va a detener para seguir generando relativas ganancias: salió el 9 de Septiembre en estreno limitado, con un precio especial para poder verla, en México aún tiene la promesa de estrenarse en cines, pero sí es preocupante analizar el ritmo de decisiones con respecto a los estrenos ya que últimamente anunciaron que Soul la siguiente película de Pixar Animation Studios se estrenará el 25 de Diciembre en plataformas digitales, esta película tenía su estreno para mediados de Noviembre, por lo que muy probablemente ya esté no muy considerada para su estreno en cines Mexicanos, esto es muy delicado si tomamos en cuenta que la piratería (especialmente en México) es muy normalizada, a la larga solo generará que esas superproducciones no recauden lo que les costó realizarlas y al final comenzará un círculo vicioso dónde perderán las productoras y de la misma manera nosotros los consumidores perderemos.

Este año si es demasiado difícil para nosotros, para la industria y para el mundo en general, va a ser una salida difícil y el próximo año será decisivo para ver cómo este panorama sale adelante.

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