Adam Thomas y Claudia Patatas son declarados culpables de pertenencia a una organización neonazi ilegal en Reino Unido
Una pareja que llamó Adolf a su bebé en honor a Hitler fue declarada ayer culpable por un tribunal de Birmingham de pertenencia a una organización neonazi ilegal, informaron fuentes judiciales.
Adam Thomas, de 22 años, y Claudia Patatas, de 38, almacenaron armas como ballestas, machetes y hachas en su casa, mientras que miembros del grupo de extrema derecha proscrito, Acción Nacional.
Según lo publicado por medios locales, durante el juicio celebrado en Birmingham, la pareja decidió ponerle a su hijo como segundo nombre Adolf porque sentía “admiración” por Hitler.
“Ahora sabemos que eran una organización peligrosa y bien estructurada”, dijo el superintendente jefe de la policía de Midland, Matt Ward, en la declaración policial.
Su objetivo era difundir la ideología neonazi provocando una guerra racial en el Reino Unido y habían pasado años adquiriendo las habilidades para llevar a cabo esto.
“Habían investigado cómo hacer explosivos. Habían recogido armas. Tenían una estructura clara para radicalizar a los demás. Sin control, habrían inspirado violencia y propagado el odio y el miedo a través de West Midlands”.
El grupo terrorista pretendía librar una “guerra santa” contra los negros, judíos, asiáticos y homosexuales.
La pareja declaró que al pequeño se le practicaban algunos rituales de origen nazi con la finalidad de reafirmar su virilidad y la superioridad de la raza aria.
Thomas tenía en su casa unas fotografías en las que se le veía acunando a su bebé mientras llevaba puesta una capucha blanca del Ku Klux Klan. Tras siete semanas de juicio y su veredicto de culpabilidad, la pareja conocerá su condena en diciembre.
Thomas, que fue rechazado en dos ocasiones para ingresar en el Ejército británico, también estaba en posesión de un manual denominado “Anarchist’s Cookbook” (El libro de cocina del anarquista), que contenía instrucciones sobre cómo fabricar artefactos explosivos. Adam Thomas, de 22 años, y Claudia Patatas, de 38, ambos con domicilio en la localidad de Banbury, fueron declarados culpables de pertenencia a National Action, una organización prohibida en 2016.
National Action, fundada en 2013, fue ilegalizada por celebrar el asesinato de la diputada laborista Jo Cox, quien perdió la vida en un ataque con arma blanca en junio de 2016 por un hombre que gritó “Britain First”, un grupo de extrema derecha.
Texto y foto: Agencias
