El desembarco se realizó durante la madrugada; no se reportan casos de COVID-19 en el navío, que zarpará la tarde de este jueves rumbo a Belice.
Cozumel tiendó un nuevo puente humanitario con la llegada, ayer miércoles, al muelle de Puerta Maya, de un crucero de la empresa Carnival, con 76 trabajadores mexicanos libres de COVID-19, incluidos 25 quintanarroenses, tres de ellos cozumeleños, que la compañía va a repatriar ante la crisis mundial que se vive actualmente por esta pandemia, confirmó el presidente municipal, Pedro Joaquín Delbouis.
En ese sentido, el presidente municipal sostuvo que este proceso se llevará nuevamente bajo estrictas medidas y protocolos de seguridad sanitaria, por lo que no representa riesgo alguno para la población de Cozumel, pues todos los connacionales repatriados están libres de COVID-19. En cuanto a los tres cozumeleños, el Ayuntamiento pondrá un vehículo a su disposición, para que sean trasladados de forma segura a sus hogares.
Del mismo modo, Pedro Joaquín Delbouis destacó la coordinación de interdependencias para realizar este proceso dirigido por la Capitanía de Puerto, al que suman esfuerzos el Ayuntamiento de Cozumel, la Secretaría Estatal de Salud (Sesa) con personal en Sanidad Internacional, la Agencia Consignataria del Sureste (Aconsur), el Instituto Nacional de Migración (INM), Sector Naval de la isla, Pilotos de Puerto, Aduana, Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) con personal de Riesgos Fitosanitarios y la misma empresa Carnival para efectuar la repatriación de forma adecuada.
“Quiero dejar en claro que el crucero de la empresa Carnival no llegará con turistas, sino con trabajadores mexicanos, todos ellos libres de COVID-19, quienes en estos momentos se quedaron sin su fuente de empleo, debido a la crisis causada por la pandemia de coronavirus. Nos enorgullece ser parte de este proceso para que los paisanos lleguen a sus hogares, con sus familias, que en estos tiempos difíciles es cuando más los necesitan”, aseguró.
El alcalde indicó que el desembarco fue vigilado por personal de Sanidad Internacional, con apego a los protocolos correspondientes, como toma de temperatura y aplicación de cuestionarios, información compartida con el Comité de Salud Municipal para garantizar el buen funcionamiento y operación del puente humanitario. Posteriormente, pasaron por la revisión migratoria y aduanal. Una vez concluido el proceso, el resto de los repatriados se irá a Playa del Carmen para llegar al muelle de Ultramar, desde donde finalmente serán enviados a sus lugares de origen, de modo que sólo pisarán tierra en el muelle y no tendrán interacción con la gente de la isla.
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