El psiquiatra Enrique Lara González, acusado por el asesinato de su colega Felipe de Jesús Triay Peniche, no asistió ayer a la audiencia programada en el Tribunal Segundo de Juicio Oral, en la cual se le impondría una pena
como participante en dicho homicidio, y fue declarado prófugo de la justicia, por lo que se giró una orden de aprehensión en su contra.
Lara González fue absuelto de los cargos por el crimen el 27 de agosto de 2016, sin embargo, el pasado 16 de diciembre, la Primera Sala Colegiada del Sistema de Justicia Penal Acusatorio del Tribunal Superior de Justicia de Yucatán, establecida en el Tribunal de Casación, abrió una nueva etapa en el juicio y el 19 de diciembre se decretó la corresponsabilidad y culpabilidad de Lara en el homicidio de Triay Peniche, se invalidó su absolución y el caso fue enviado de vuelta al Tribunal Segundo de Juicio Oral para la Individualización de su sanción.
Tras no presentarse a dicha audiencia, el mismo Tribunal Segundo de Juicio Oral declaró a Lara “Sustraído de la justicia” y ordenó su detención. Previamente, el pasado 24 de diciembre, abogados y familiares del Dr. Felipe Triay
Peniche manifestaron su inconformidad hacia la autoridad por la decisión de no emitir la orden de aprehensión desde el momento en que se revocó la sentencia de no culpabilidad contra el ahora prófugo para evitar que su ausencia en la audiencia o su probable escape.
Cabe recordar que Enrique Lara fue enjuiciado junto con el psiquiatra Pablo Santos García Gutiérrez, ambos acusados como probables autores del asesinato de Triay Peniche llevado a cabo en agosto de 2014. El cuerpo del hoy occiso fue desmembrado y sus restos (conservados durante cinco días en congelación en la vivienda de García Gutiérrez) fueron encontrados en una camioneta ubicada en el estacionamiento de un supermercado.
El 16 de septiembre del presente, García Gutiérrez fue condenado por el Tribunal Segundo de Juicio Oral a una pena de 35 años de prisión y a pagar una cantidad de 35 millones 663 mil 426 pesos como indemnización a víctimas indirectas del crimen. En esa misma instancia se definió la absolución de Lara González, pero la parte acusadora del caso recurrió al Tribunal de Casación para revertir el veredicto, mismo que falló a su favor y desembocó en el decreto de culpabilidad y la orden de aprehensión del psiquiatra.
– Martín Arias
