Por Rodrigo Aguilar
Inicia el camino mundialista, ese que recorremos con ilusión cada cuatro años, una vez más con nuevo capitán en el barco y, una vez más, con incertidumbre y bajas en el rendimiento de nuestros mejores hombres, particularmente los delanteros.
Aunque el camino apenas comienza y será muy largo, preocupa que nuevamente nuestro arsenal de goleadores no llega con todos en buen nivel, mejor dicho llegan a desnivel.
Lo que marca la diferencia de las grandes selecciones con el resto es la regularidad en su rendimiento dentro del campo a nivel individual que finalmente al sumar se traduce en un rendimiento de alto nivel como equipo, en forma regular, casi cotidiana.
Mantener de manera sostenida ese buen rendimiento o alto nivel siempre es uno de los principales retos de las selecciones en vías de aspirar a figurar algún día entre las grandes, como la Selección Mexicana.
Ahora que inicia un ciclo vemos con gusto las destacadas participaciones de Raúl Jiménez y Diego Lainez en Europa, al tiempo que el “Chicharito” y el “Chucky” han venido a la baja hasta casi dejar de aparecer en el campo. Henry Martín lucha por su cuenta por ser titular en el América, entregando buenas actuaciones que parecen no ser suficientes para su técnico Miguel Herrera, pero sí para el timonel del tricolor Gerardo “ el Tata” Martino.
Para no perder la costumbre, este duelo de desniveles entre los artilleros mexicanos para el nuevo ciclo mundialista es de pronóstico reservado.
