Editorial

El gobernador Mauricio Vila Dosal envió un comunicado importante, pero que muchos pasaron por alto y es que para el mandatario es momento de ver hacia delante y dejar de considerar al coronavirus como una emergencia en Yucatán.

Muchos se preguntarán si esta postura es adecuada, pero aquí entra un amplio análisis en juego. En primera instancia se encuentra el hecho de que la economía yucateca no aguantará un año completo detenida y en cuarentena.

Todas aquellas voces que piden que se mantengan los protocolos de cuarentena no están tomando en cuenta que si son trabajadores, sus empresas no tienen ingresos para pagarles su salario y ante la falta de apoyo del Gobierno Federal, el Estado no tiene dinero para otorgar subsidios al salario, lo que sería una catástrofe para el empleo mucho mayor de la que ya lo es.

El Gobernador afirmó que debemos aprender a convivir con el coronavirus y que se le dará prioridad a la salud, pero sin dejar de lado el aspecto económico o el educativo. Esto quiere decir que será muy difícil que Yucatán regrese al Semáforo Rojo, y que desde ahora sólo se encaminará hacia la reactivación.

Este mensaje es importante y seguramente algo esperado por el sector empresarial, que dejará de sentirse presionado por volver a la cuarentena. Habrá que ver qué nos espera luego de este cambio de dirección en la toma de decisiones.

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