Siguen cayendo las reacciones por el tema del Presupuesto 2020, lo que aviva la polémica sobre el recorte en comparación del año pasado y, en consecuencia, la decisión de implementar el pago de derechos o impuestos que son aquellos que están generando incomodidad entre los yucatecos.
Ahora fue el senador Jorge Carlos Ramírez Marín quien dejó en claro algo que está en el pensamiento de muchos yucatecos, como es el hecho de que la seguridad debe ser garantizada por el mismo gobierno y que el ciudadano no debe estar pensando en pagarla.
Sin embargo, lo mas importante se está dando en el tema turístico.
En agosto del 2018, cuando nació el Oretur (Organismo Empresarial Turístico de Yucatán), en Peninsular Punto Medio nos dimos a la tarea de hacer un análisis sobre la división que existe en el sector turístico y las razones por las que se presentó.
Hoy, 10 de diciembre del 2019, luego de anunciarse la propuesta de incrementar el Impuesto al Hospedaje, este enfrentamiento no sólo es claro, sino que se ha recrudecido de tal modo que se ha convertido en el escándalo empresarial de la segunda mitad del año. Incluso los representantes turísticos están culpando a la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Mérida de tomar la palabra por todo el sector.
Es increíble cómo este conflicto se le salió de las manos al Gobierno del Estado y que no se hayan podido sentar a dialogar los actores involucrados, y que sobre todo, hayan dejado que las rencillas políticas ensucien al sector económico que más empleos y derrama de recursos deja a Yucatán. De no creerse.
