El talentoso amigo del hombre

No solo los seres humanos tienen  talentos, ¡los perros también!, según corrobora una investigación de la universidad Eötvös Loránd de Hungría, que revela que un pequeño porcentaje de canes está excepcionalmente dotado para el aprendizaje de palabras y son capaces de asimilar, sin esfuerzo, los nombres de decenas de  juguetes.

Algunas personas excepcionalmente dotadas han marcado la historia y la cultura de la humanidad. Leonardo Da Vinci, Mozart o Einstein son algunos ejemplos  de este fenómeno, que ahora se ha comprobado que no es exclusivamente humano, ya que algunos perros también tienen un talento especial en un campo determinado.

Todavía se desconoce si existen abejas, elefantes o animales marinos -solo por nombrar algunas especies- dotados de una capacidad intelectual o una aptitud especial para aprender con facilidad un tipo específico de asuntos, pero ahora hay evidencia de que, al menos una especie no humana, exhibe talento en un campo específico: el “canis lupus familiaris”, es decir el perro.

La mayoría de los canes domésticos tienen dificultades para aprender las etiquetas de los objetos, por ejemplo los nombres de sus propios juguetes, pero una minoría es capaz de hacerlo de modo notable, incluso con objetos que no conoce de antemano.

DOTADOS PARA APRENDER PALABRAS

Se acaba de descubrir que un puñado de perros  están especialmente dotados para asimilar palabras y aprenden los nombres múltiples de juguetes, aparentemente sin esfuerzo, según un estudio de la universidad Eötvös Loránd University (ELTE), de Budapest (Hungría).

Este sorprendente hallazgo lo efectuó un equipo del Proyecto Perro de Familia (https://familydogproject.elte.hu) del Departamento de Etología de la ELTE.

Los investigadores expusieron a cuarenta perros a un entrenamiento intensivo de tres meses destinado a enseñarles el nombre de, al menos dos juguetes caninos, considerada la cantidad mínima necesaria para poder evaluar si un perro puede distinguir los elementos según sus nombres, de acuerdo a la ELTE (www.elte.hu/en).

El programa de entrenamiento, publicado en la revista científica Scientific Reports, incluyó interacciones diarias entre el perro y el dueño, durante las cuales la persona repitió el nombre del juguete varias veces ante el animal, así como una serie de sesiones semanales en las que también participó un adiestrador de perros, informó la universidad.

Para este estudio “reclutamos perros cachorros y adultos”, explicó la doctora Claudia Fugazza, investigadora principal de este proyecto, quien señaló que a los investigadores les sorprendió descubrir que, a pesar del entrenamiento intensivo, la mayoría de los perros, independientemente de su edad, no mostraban ninguna evidencia de aprendizaje.

Pero más sorprendente aún fue descubrir que siete perros adultos mostraron una capacidad de aprendizaje excepcional: no solo aprendieron los dos nombres de los juguetes originales, sino que, durante el tiempo del estudio, fueron capaces de aprender los nuevos nombres de entre 11 y 37 juguetes adicionales”, prosigue la investigadora.

Seis de los siete perros adultos ‘talentosos’ ya poseían un vocabulario de nombres de juguetes cuando comenzó el estudio. El séptimo perro, llamado Oliva, no conocía previamente los nombres de los juguetes, pero aprendió 21  en solo dos meses, manteniendo el ritmo de aprendizaje de palabras de sus otros seis compañeros dotados, según la ELTE.

Esto puede sugerir que la capacidad excepcional de aprender nombres de objetos no presupone necesariamente una experiencia previa, según los investigadores de Hungría.

“Los siete perros que demostraron este talento excepcional son border collies, una raza destinada a cooperar con los humanos con fines de pastoreo”, informó Shany Dror, coautor del estudio, aclarando que “es importante tener en cuenta que, dentro de los muchos perros que no mostraron ninguna evidencia de aprendizaje, también hubo dieciocho border collies”.

Explicó que en la literatura científica se informa que algunos canes de otras razas, como al menos un yorkshire terrier, tienen la capacidad de adquirir conocimientos de vocabulario.

“Aunque ser un border collie podría aumentar las posibilidades de tener esa capacidad de aprendizaje, pertenecer a esa raza no es una condición necesaria ni suficiente para ser un perro especialmente dotado para aprender palabras”, remarcó Dror.

NUEVO MODELO PARA INVESTIGAR

Para el doctor Adam Miklósi, jefe del Departamento de Etología y coautor del trabajo, este estudio “es solo el comienzo de un viaje que nos llevará a comprender mejor las raíces del talento, es decir, por qué algunos individuos, humanos y de otras especies, están dotados en un campo determinado”.

Miklósi, al igual que Fugazza, piensa que los perros pueden ser un modelo ideal para estudiar los orígenes del talento y las variaciones de las capacidades cognitivas entre las personas.

“Durante muchos años los científicos han intentado averiguar si el talento tiene una base genética o si los factores del entorno, como la educación y la práctica deliberada, juegan un papel en el surgimiento de esta cualidad, y en qué medida podrían influir”, explicó la doctora Fugazza.

La científica también señaló que las investigaciones en personas ofrecen respuestas limitadas sobre el origen del talento porque, a su vez, este tipo de estudios tienen limitaciones, principalmente debidas a la imposibilidad de realizar manipulaciones experimentales en el entorno de crianza y por la duración de los estudios longitudinales, ya que la esperanza de vida de los seres humanos es larga.

“Nuestro hallazgo sobre la existencia del talento en un campo cognitivo específico en una especie no humana y, en particular, en los perros, puede allanar el camino para superar estas dificultades”, señaló esta doctora en etología y entrenadora de perros italiana, radicada en Hungría.

“Los perros evolucionaron y se desarrollan en el ambiente humano y, por ello, pensamos que esta especie es un modelo ideal para estudiar los orígenes del talento, superando así las limitaciones de los estudios en personas”, recalcó.

Fugazza cree que este estudio es el primer hito que allana el camino para una mejor comprensión de los orígenes del talento, superando las limitaciones de la investigación del talento humano mediante el uso de perros como especie modelo representativa.

“Una vez más, el perro, nuestro mejor amigo, también puede enseñarnos algunas lecciones sobre nosotros mismos”, señaló.

Para reclutar más de estos raros y dotados canes aprendices de palabras para proseguir sus estudios, los investigadores de la ELTE han lanzado el proyecto Genius Dog Challenge o ‘Desafío del perro genio’ (http://geniusdogchallenge.com y www.youtube.com/channel/UCDvr5quzSS8xmOPOHzMokjA).

Texto y fotos: Efe

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.