El sistema de Gerardo Martino en la Selección Mexicana agarra forma, con Diego Lainez, Hirving Lozano y Raúl Jiménez como la nueva generación en el ataque.
El argentino trabaja con un esquema básico y de su gusto, un 4-3-3. Sin complicaciones y que le puede servir para generar el fútbol que quiere.
Fuentes cercanas tuvieron conocimiento de la alineación que “Tata” usaría ante Chile, su primer compromiso en el banquillo Tricolor.
Guillermo Ochoa es el amo de la portería, ni Raúl Gudiño, mucho menos Hugo González, son competencias para el meta del Standard.
La defensa estaría conformada por Miguel Layún, Néstor Araujo, Héctor Moreno y Jesús Gallardo. José Juan Vázquez, en su regreso a la Selección sería el encargado de la contención; Jonathan Dos Santos y Andrés Guardado, el capitán, como volantes.
Diego Lainez, por el costado izquierdo, Hirving Lozano, por el derecho, y Raúl Jiménez en la punta de la delantera mexicana.
El argentino todavía mueve sus fichas, analiza las labores de sus pupilos y tomará su decisión antes de medirse ante La Roja.
El “Tata”, quien tomó los controles tras la participación en el Mundial de Rusia 2018, quiere emular lo hecho por Juan Carlos Osorio, Miguel Herrera, José Manuel de la Torre y Sven-Goran Eriksson al imponerse en su presentación en el banquillo tricolor.
El sueco en 2008 doblegó 2-1 a Honduras en su debut, “Chepo” lo siguió en 2011 al imponerse 2-0 a Bosnia. El “Piojo”, tras un irregular proceso mundialista, comenzó su andar con una victoria ante Finlandia 4-2 antes de doblegar a Nueva Zelanda y finalmente el último dirigente del combinado azteca, Juan Carlos Osorio, inició con un 3-0 ante El Salvador.
Hugo Sánchez fue el último entrenador que cayó en su primer juego con el Tri (2007) cuando Estados Unidos los superó 2-0 sin contar a los reemplazos en los diferentes procesos como fue el caso de Luis Fernando Tena, Víctor Manuel Vucetich, “Tuca” Ferretti y Javier Aguirre, entre otros.
Texto y foto: Agencias
