El estrés es una respuesta natural del organismo que permite reaccionar ante la tensión, sustos o malas noticias, pero cuando se vuelve crónico perjudica la salud por el exceso de cortisol que se libera en el organismo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define al estrés laboral como la reacción que puede tener el individuo ante exigencias y presiones laborales que no se ajustan a sus conocimientos y capacidades. Según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social, 75% de los mexicanos padecen fatiga por estrés laboral.
Nathalie Sessions, nutrióloga de Bienestar Corporativo del Hospital Houston Methodist, explica que el desequilibrio bioquímico y emocional, posiblemente propicie el aumento de la frecuencia cardíaca a lo largo del tiempo, causando riesgo de enfermedades del corazón, adicciones a sustancias e incluso desórdenes alimenticios. “Cuando estamos estresados de manera crónica, nuestro comportamiento puede inclinarse hacia elecciones no saludables de alimentos, como, por ejemplo: helados, comida rápida en lugar de verduras y fruta”, subraya la especialista.
Exhorta para el bienestar de los trabajadores y una mejor productividad realizar ejercicios de respiración profunda, alimentarse sanamente, tener un sueño reparador, enfocarse en una sola tarea a la vez y escuchar música de 60 beats por minuto o hacer ejercicio.
Nathalie Sessions comenta que, por ejemplo, después de una junta laboral con alta carga de trabajo, o antes de llegar a la oficina es recomendable practicar ejercicios de respiración profunda por 10 minutos. Para ello se debe tomar aire por la nariz y contar mental y lentamente hasta cinco, luego exhalar lentamente por la boca contando en la mente hasta cinco. Este tipo de respiración ayuda a oxigenar y relajar el cerebro.
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