La vaquita marina se enfrenta a la extinción inminente y ante el pronóstico, en esta misma semana, la organización Sea Sepherd que trabaja en conjunto con la Policia Federal para resguardar la Vaquita, ha encontrado lo que parece ser el primer cuerpo sin vida de esta especie en el 2019, una tragedia para el medio ambiente y las futuras generaciones, y una desgracia que refleja la incompetencia del gobierno mexicano para proteger a los animales en peligro de extinción.
De una centena de ejemplares que quedaban en el 2015, el Comité Internacional por el Rescate de la Vaquita Marina ha confirmado que el número de Vaquitas Marinas se ha reducido drásticamente, al punto en el que en en día, se calcula que hoy sólo puedan existir entre 6 y 22 animales.
La lucha a contra reloj por preservar esta especie, ha sido impedida por la pesca furtiva y las redes de pescadores que buscan otros animales: Redes, en las que muchas veces, las Vaquitas Marinas quedan atrapadas y confinadas a muerte.
Como medida de prevención, a partir del 2015, el gobierno federal dio apoyos económicos a pescadores, para mantener la veda, algo que funcionó en buena parte en estos últimos años, pero la actual administración, ha puesto fin a los subsidios y de acuerdo a un reporte de Animal Político, más de mil embarcaciones que pertenecen a los pescadores de las comunidades de San Felipe y Sana Clara en Baja California, regresarán a sus actividades si no reciben el apoyo económico a más tardar el 22 de marzo, una fecha que podría significar la estocada final para la Vaquita Marina.
La vaquita marina, es originaria y endémica de México, es decir, que no se encuentra en otras partes del mundo y su extinción, no sólo podría alterar la cadena marina, sino que también tendría un impacto de devastación en el medio ambiente y nuestro país, sería el más afectado.
Texto y foto: Cortesía
