Los activistas de este colectivo independiente acudieron a los juzgados federales para hacer un llamado a los jueces para ponerse de lado de los ejidatarios que interpusieron el reclamo contra la mega granja porcícola.

Martha Capetillo Pasos, integrante Indignación, dijo que se manifestaron acompañados de representantes del organismo Guardianes de los Cenotes, ante la posible resolución de amparo que sigue en los juzgados federales del Decimocuarto Circuito Judicial de la Federación.

Los dos organismos presentaron un recurso de revisión por presuntas irregularidades en la  Manifestación de Impacto Ambiental de la megagranja porcícola instalada en Homún. 

Según explicaron los activistas, existe una profunda preocupación por los razonamientos regresivos expresados en el proyecto de sentencia que son contrarios a los criterios amplios de protección a los derechos humanos.

En la explicación ofrecida, informó que la resolución judicial que se emitirá este jueves iría en contra de los derechos de los pueblos originarios y ponen en riesgo el medio ambiente, la reserva geohidrológica del anillo de los cenotes de la zona centro del estado y el modo de vida de la población.

El proyecto de sentencia es público y está programado para ser el primer asunto que desahogarán mañana los magistrados del Tribunal Colegiado en Materia del Trabajo y Administrativa del Decimocuarto Circuito del Poder Judicial de la Federación,.

El amparo en revisión se refiere a la Manifestación de Impacto Ambiental presentado con irregularidades tan evidentes, como la firma de una dentista que no demuestra tener conocimiento en materia ambiental. 

El proyecto de sentencia claramente se contrapone al principio sostenido por el Relator del Agua de Naciones Unidas y por los criterios sostenidos por la legislación internacional de los derechos humanos, que establecen que el agua es prioritaria para la vida y como tal tiene prioridad sobre cualquier proyecto económico, afirmó este organismo civil.

La carta dirigida al Tribunal dice: “expresamos nuestra preocupación por la manera como se trivializa, se da por cumplido y, por tanto, se niega el principio precautorio. El proyecto de sentencia incluso señala que este principio (el precautorio) “no es paralizante de las actividades tecnológicas o industriales, ni debe usarse como pretexto para bloquear el crecimiento y desarrollo”.

Nos alarma el uso de una lógica falaz y engañosa, similar a la utilizada por el juez que negó el amparo a Homún por considerar que la granja traería empleo, cuando este pueblo ha construido una actividad empresarial relacionada con el turismo de bajo impacto que le proporciona solvencia económica, afirmaron.

“Para el equipo Indignación y para los Guardianes de los Cenotes es indispensable denunciar el ataque a los derechos de los pueblos indígenas que esto representa y que afectaría decisiones futuras, precisamente en el momento en el que distintos proyectos se anuncian en la península e incluso inician sin haber consultado a los pueblos” dice el documento.

Texto y foto: ACOM