Un hombre irrumpió en un estudio de animación en Kioto, Tokio, al grito de “¡mueran!” y provocó un incendio que dejó al menos 33 fallecidos, reportaron agencias internacionales.
El suceso ocurrió este jueves en los estudios Kyoto Animation, en un edificio de tres plantas que fue consumido rápidamente por las llamas.
Fuentes de la policía de Kioto confirmaron a la cadena pública de televisión NHK que la cifra de muertos confirmada es de 33, lo que convierte este caso en el incendio provocado más grave en décadas.
Según dijo a EFE una fuente de los bomberos de la ciudad, además hay cerca de una treinta heridos, algunos en estado grave. En el momento del siniestro, había unas setenta personas dentro del edificio.
Los sobrevivientes que vieron al agresor dijeron que no trabajaba en la firma y que gritaba “¡mueran!” mientras tiraba un líquido no identificado para acelerar las llamas, publicó la prensa asiática.
? Al menos 24 muertos en un incendio en el estudio de Kyoto Animation, #Japon
? Unas 30 personas están desaparecidas
? Las autoridades están investigando un posible ataque pic.twitter.com/umJr9GryCe— Noticias CMM (@CMM_noticias) July 18, 2019
Por viejos rencores
EFE publica que el presunto responsable del incendio había acumulado viejos rencores porque supuestamente los estudios le copiaron alguna idea y decidió arremeter contra la empresa.
Una vecina declaró que el presunto responsable sufrió quemaduras en los brazos y en las piernas, y cuando estaba custodiado por la policía decía que los estudios le habían “copiado” algo, y por eso actuó así.
Fuentes policiales han señalado que el sospechoso, que llevaba un tatuaje en el abdomen, admitió ser culpable de lo ocurrido.
Police say there have been multiple deaths in a fire at an animation studio in Kyoto. They say a 41-year-old man poured what appeared to be gasoline around the studio. pic.twitter.com/xBr0s4R6VF
— NHK WORLD News (@NHKWORLD_News) July 18, 2019
Denuncian amenazas
Un responsable de la compañía señaló que la empresa había recibido amenazas contra uno o varios empleados desde hace un par de años.
Uno de los testigos dijo a la agencia local Kyodo que pudo ver a varias personas “cubiertas en sangre” y que habían sufrido quemaduras “por todo su cuerpo”.