Integrantes del Frente Nacional por la Familia (FNF) calificaron de “ataque” la imposición internacional y que ahora el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) pretende en Yucatán para legislar en favor de la unión igualitaria.
Como informamos hace unos días, el Conapred pidió al Congreso del Estado de Yucatán fijar una postura a favor de la denominada “unión sin discriminación” o “unión igualitaria”, al referirse a las parejas del mismo sexo.
Altia Celis Quintal, vicepresidenta en Yucatán de la agrupación, informó que el FNF exige el respeto a la voluntad de los padres de familia para educar libremente a los hijos, sin la imposición de ideologías extranjeras.
“Además, queremos tener opinión y voz en las iniciativas que se están pasando con esta idea de modificar la forma de convivencia de las parejas. Pero se debe considerar que cada nación es soberana”, dijo Celis Quintal con lo que definió que la imposición que proviene de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), así como el Conapred en México, representan un ataque a la libertad y soberanía nacional.
Destacó que hoy en día, lo que se pretende por parte de quienes promueven este tipo de convivencia, es cambiar la constitución a su manera para poder, de esta forma, contar con una ley a conveniencia que permita hacer legal lo que no tiene un sustento natural.
“Ha sido evidente la agenda que este nuevo gobierno federal tiene, favoreciendo este tipo de ideas”, consideró la activista al referirse al gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador con el Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Aseguró que son más las personas que se encuentran en contra de esta imposición pero temen hablar porque existe una campaña sistemática para señalar a todo aquel que se encuentre en contra de esta postura internacional.
Por su parte, Marcos Vera Badías, vocero de la agrupación, complementó que existe una “retórica” en la que buscan intimidar a quienes están en contra de esta idea, con el argumento de que el hijo que vive con el abuelo es otra forma de familia.
“La realidad es que es una retórica que es completamente rebatible y que tiene como sustento el hecho de que todos los seres humanos provenimos de la unión de un hombre y una mujer. No hay vuelta de hoja”, explicó.
Texto y foto: Iván Duarte
