Indignados por la manera en la que a través de la Canaco-Servytur se coaccionó a 19 hoteleros para que votaran entre pagar los 35 pesos establecidos en la Ley General de Hacienda presentada al Congreso como un derecho para la preservación y restauración del equilibrio ecológico o aumentar el impuesto al hospedaje del 3 al 5 por ciento (%), directivos de la Asociación Mexicana de Hoteles de Yucatán (AMHY) convocaron ayer por la tarde a una rueda de prensa de manera urgente, la cual fue encabezada por su presidente, Héctor Navarrete Medina.
Antes que nada dejaron en claro que los hoteleros que votaron no representan los intereses de los 173 hoteles afiliados a la agrupación, y que en dicha reunión se puso sobre la mesa la contrapropuesta de la AMHY de que fuera mediante el incremento del impuesto a las nóminas de un 0.15 %, para pasar de un 2.5 % a un 2.65 %, la manera en la que el estado recaudara los recursos necesarios para hacer frente a los compromisos contraídos, pero la iniciativa fue desechada.
En la sesión también estuvo presente el hotelero Michel Farah, quien se dijo ofendido por la manera en la que se cambió un derecho ecológico por un impuesto, dejando en claro que la preocupación del estado no es el medioambiente sino tener más recaudación, sin importarle que se perjudique el bolsillo del sector turístico que atraviesa por un momento complejo, porque hay una mayor oferta que demanda de servicios y además tienen en contra la competencia desleal de las plataformas.
Se mencionó que se les advirtió que si no votaban por el incremento del impuesto por hospedaje quedaría firme la propuesta de aportar 35 pesos por habitación, por lo que a nombre de los empresarios del sector, Navarrete Medina manifestó su repudio a esta forma indebida de imponer más gravámenes a la actividad turística.
El dirigente criticó que no se convocara a la reunión celebrada en la Canaco-Servytur ayer por la mañana a la Asociación Mexicana de Hoteles en Yucatán, ni tampoco a la Asociación de Agencias Promotoras de Turismo de Yucatán o al Consejo Empresarial Turístico de Yucatán, cuyos directivos, Luis Arturo Herrera Albertos y Jaime Solís Garza, respectivamente, acudieron a la rueda de prensa en la que se señaló que de aumentar un 0.15 % el impuesto sobre nóminas la recaudación sería de 85 millones de pesos contra los 78 millones que se juntarían si se cobra un 5 % de impuestos a la hotelería.
De esta manera calificaron como una burla la manera en la que se logró hacer la modificación a la Ley de Ingresos 2020, que adelantaron estarán combatiendo jurídicamente como también con otras acciones como los carteles que se colocaron con la leyenda de no más impuestos al turismo e inclusive con paros.
Por lo pronto la contrapropuesta de la AMHY se envió por escrito al presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado, Felipe Cervera Hernández, y al momento de la reunión se hacía lo propio con el Gobierno estatal.
Por su parte, el ex dirigente de la AMHY, Ricardo Dájer Nahum, lamentó que de nueva cuenta no se haya recurrido al diálogo para atender este asunto y que al igual que ocurrió el año pasado, cuando de un día para otro se les avisó de un aumento del 103 % al costo de los accesos a las Zonas Arqueológicas, ahora también los empresarios tengan fuertes afectaciones que podrían llevarlos a poner en juego su patrimonio, especialmente a hoteles que se encuentran en el interior del estado.
-Nuestra postura es mantenernos en contra de incrementos de impuestos que además de afectar al sector, también repercuten en la población que está relacionada con el turismo, los que hacen artesanías, los restaurantes, los que ofrecen tours, lamentablemente no han entendido que en este sector las decisiones no se toman de un día para otro -concluyó.
Texto y foto: Manuel Pool
