Por Carlos Pérez
¡Sálvense quien pueda! Es el título del nuevo libro del periodista Andrés Oppenheimer, quien fiel a su estilo nos presenta una investigación sobre lo que ya está sucediendo en las empresas como resultado de la automatización, es decir, el despido de empleados. En este texto los seguidores de este conocido periodista leerán a expertos que afirman que el 47% de los trabajos existentes corren el riesgo de desaparecer, debido a la automatización, por lo tanto resultarán obsoletos por el desarrollo de la tecnología, los que han tenido oportunidad de leer esta investigación terminan preocupados, por que al final sentencia Oppenheimer: En un futuro muy cercano cambiara drásticamente la definición de lo que hoy conocemos como “Empleo”.
Esta obra, se suma a las noticias que recibimos esta semana del despido de 2000 mil empleados de Banamex; según esta institución bancaria este movimiento se debe a la transformación tecnológica de sus operaciones; de igual forma BBVA Bancomer inició el despido de cerca de 1500 trabajadores como resultado de sus estrategias de digitalización y a la implementación de nuevas tecnologías en sus sucursales; adicional a lo anterior, Banorte toma la misma acción al adquirir al Grupo Financiero Interacciones, esperemos que esta decisión no sea lo que presenta Oppenheimer en su investigación.
Pero, ¿qué podemos hacer ante este panorama que cada vez más crece? Lo primero es que nosotros debemos entender que nunca se regresará a aquellos tiempos donde la tecnología aún estaba en crecimiento, por lo tanto, debemos subirnos a ese “barco” de la tecnología, es decir, capacitarnos en lo que consideramos una debilidad en nuestro trabajo y si ya estoy abordo, entonces tengo que estar pendiente de los constantes cambios en mi área laboral.
Por tal motivo las empresas de igual forma deben estar atentas a los cambios, por ejemplo a la automatización, que no lo debemos ver como un problema, sino como un desafío. Lo que es bien cierto es que no podemos pensar que el hombre puede ser substituido por una máquina, ya que tiene cualidades únicas. Y es verdad que la tecnología llegó para quedarse, pero el hombre llegó a la Tierra antes que la tecnología, no lo olvidemos.
