Según el expresidente del Colegio de Arquitectos, Elías Cisneros Ávila, estas estructuras no están hechas para ser duraderas
Los maceteros que fueron colocados en el Centro Histórico de la ciudad no están hechos de concreto, sino de una especie de fibra de vidrio reforzado, por lo que no son tan resistentes al paso de tiempo y deberían retirarse cuando las condiciones de la pandemia lo permitan, señaló Elías Cisneros Ávila, expresidente del Colegio Yucateco de Arquitectos, una de las instituciones a las que el Gobierno del Estado presentó el Plan de Movilidad Urbana en la referida zona de la ciudad.
“Si te fijas, los materiales de los que están hechos (los maceteros) tampoco son, por decir, de concreto que duren 20 años, es un material no tan resistente al paso del tiempo porque es una medida temporal”, explicó el arquitecto.
Asimismo, consideró la instalación de los maceteros como una medida acertada, en el sentido de que se logró ampliar virtualmente el espacio por donde transita la gente, al permitir conservar la sana distancia y evitar las aglomeraciones que usualmente se daban en las banquetas del centro.
Cabe mencionar que Cisneros Ávila fue el presidente del Colegio Yucateco de Arquitectos durante la presentación de esta medida; sin embargo, hace aproximadamente un mes dicha institución tuvo un cambio de directiva, quedando al frente Miguel Sosa Correa.
De acuerdo con Elías Cisneros, ya comenzaron las invitaciones para organizar la próxima reunión del Consejo Municipal que se reúne una vez cada dos meses y en el que participa el Instituto Municipal de Planeación (Implan) y distintas organizaciones como los colegios Yucateco de Arquitectos, y de Ingenieros Civiles de Yucatán, entre otros.
En ese sentido, Miguel Sosa, actual dirigente del Colegio Yucateco de Arquitectos, mencionó que en esta ocasión el tema de los maceteros y los paraderos debe ser un punto que estará en la agenda del día, y agregó que en la postura del Colegio, las autoridades deben realizar un análisis de las zonas y las calles donde se podrían conservar estas estructuras y en cuáles ya deben ser retirados, pues el centro de la ciudad tiene diferentes funciones con respecto a la zona, por ejemplo, tiene partes comerciales, turísticas e incluso institucionales en las que hay dependencias de gobierno.
Entre los elementos que se deben considerar al momento de analizar el urbanismo de la ciudad, añadió, se encuentran factores como la luminosidad, el ruido, la velocidad del tránsito por las vías y otros. Entre las principales vías que tiene el centro están las calles 59, 61, 58, 60 y 62, explicó el actual presidente de los arquitectos.
Con respecto a los paraderos, Sosa Correa también consideró como acertada la idea de moverlos, pues en las reuniones que tuvieron se planteaba que “a veces no importa si se aleja tu paradero una cuadra, si va estar más cómodo, si vas a caminar más seguro y más iluminado, posiblemente una cuadra pues no sea tan determinante”.
De igual forma dijo que el asunto del transporte es un tema pendiente, por las complicaciones que conlleva, pues toca varias vertientes, aristas, intereses e incluso costumbres de los mismos yucatecos, además de la seguridad que necesita la ciudadanía, por lo que la realidad es que prácticamente “nadie le quiere meter”, debido a que incluso son costumbres que más o menos dan trabajo romper.
A su vez, Elías Cisneros aseguró que en el Colegio de Arquitectos cuentan con diseñadores urbanos, de paisaje, especialistas en diseño de iluminado y acústico, quienes pueden aportar en las mesas de trabajo con el Gobierno del Estado para que la ciudad cumpla con los niveles de normatividad en iluminación y en sonido.
Ambos arquitectos coincidieron en que, para la implementación del plan de movilidad, el Gobierno estatal solamente les presentó las acciones que tomaría para contener lo más posible la pandemia, y resaltaron que muchas de las decisiones tomadas fueron en el contexto de esta enfermedad y que varias medidas solo fueron pensadas para funcionar temporalmente.
Finalmente Sosa Correa afirmó que le gustaría participar más en la parte de los proyectos con sus especialistas, poder aportar más en el diseño de los proyectos con las opiniones de profesionales provenientes del mismo y no solo conocer el proyecto y las acciones una vez que están por aplicarse.
Texto: Diego Cervantes
Fotos: Cortesía
