Monitoreos en tiempo real

Por Armando Escalante

Todos quienes estamos en las redes -en una o varias- generalmente tenemos acceso a mucha información inmediata, reciente y en tiempo real casi al momento en que está ocurriendo un hecho, de los más variados contenidos o asuntos, públicos y/o privados. Esto ocurre por la gran cantidad de personas que tienen a su alcance un teléfono celular con cámara y además pertenecen a alguna red.

Podemos ver asombrados una golpiza grabada por celular en una nueva plaza comercial, en la que no interviene ningún guardia ni policía alguno o bien, seguir en vídeo a un motociclista atropellado -encaramado en un auto-, viendo cómo se lo lleva un enajenado guiador, todo gracias a las “benditas redes”.

Así las cosas, ayer nos enteramos, casi enseguida que “explotó” el popocatépetl (como sucede siempre cada diciembre o cada que la nieve bloquea el cráter del volcán), gracias a la red llamada red WebCam de México o de SkyAlertMx (alerta sísmica) que tiene una serie de cámaras en puntos estratégicos mirando al domo de lava, que captó el momento justo del fenómeno, el cual fue visto y transmitido en vivo -tiempo real- por las cuentas que tienen en las distintas redes sociales.

A su vez, las autoridades del Centro Nacional de Prevención de Desastres y las de de Protección Civil, que son la voz autorizada que está al tanto del asunto en esa zona, igualmente emitieron los avisos y reportes del caso, con las imágenes respectivas y la información oficial. Todo esto al alcance de la mano de quien guste informarse pero sobretodo, en la fecha y hora correcta del suceso.

Y es que como ya hemos señalado en anteriores entregas, en la red hay de todo, desde versiones oficiales hasta engaños y fakenews para hacer caer a quien se deje. Por ejemplo imagine usted que esos mismos vídeos del popocatépetl estallando con fuego y lava sean vistos en otro momento, es decir, que no estuviera ocurriendo tal explosión y que se comparta en una cadena de whatsapp, y no de la vía directa que lo transmitió, dando por hecho que el volcán volvió a lanzar fuego y lava, y que además se le añada un texto alarmista sobre riesgos de temblores en la zona metropolitana… ¿acaso no es la tormenta perfecta para causar alarma y desinformación?

Aprenda a revisar el contenido de sus redes y sobretodo, distinga cuáles son las fuentes oficiales y dignas de crédito de las que suelen verle la cara. No deje que se burlen de usted.

 

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