Por: Marcial Méndez
La noticia del tiroteo escolar ocurrido en Torreón el pasado 10 de enero ya ha recorrido toda la nación. Como es común en tragedias como esta, los medios y autoridades no tardaron en saltar a conclusiones y achacarle la culpa a los videojuegos. Por ejemplo, el gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, conjeturó en una conferencia de prensa que el tirador pudo haber sido influenciado por un videojuego llamado ‘Natural Selection’, basándose en que la camiseta usada por el perpetrador contenía tal frase. Muchos medios informativos aseveraron lo mismo; Televisa incluso dijo en su transmisión en vivo de Foro TV que el tirador estaba disfrazado de un personaje de videojuego llamado Harry.
¿Harry? ¿Natural Selection? Los usuarios de internet no tardaron en hilar lo que los noticieros y las autoridades no pudieron durante sus investigaciones iniciales: la vestimenta del tirador no hacía alusión a un videojuego, sino que a Eric Harris, uno de los dos responsables de la masacre de Columbine, quien, durante aquel sangriento episodio, vistió una camiseta que leía ‘Natural Selection’. Por si eso no fuera suficiente, el tirador de Torreón no solo copió esa parte de la vestimenta de Harris, sino que también adoptó sus tirantes y pantalones negros.
Si bien sí existe un videojuego llamado Natural Selection, este es un mod de Half-Life que fue lanzado en el 2002, años antes del nacimiento del tirador de Torreón. Aunque claro que es posible que este último haya jugado tal título o su secuela (lanzada en el 2012), ello parece improbable y, en todo caso, es claro que su atuendo el día de los hechos no era el de ningún personaje de videojuegos, sino el del tirador escolar antes mencionado.
Los reportes erróneos, la importancia exagerada otorgada al mod de Half-Life y las conjeturas infundadas respecto a la relación entre videojuegos y violencia resultan decepcionantes y demuestran la incompetencia e irresponsabilidad de los medios y las autoridades mexicanas. El gobernador Riquelme, que no es ningún experto en la materia ni contaba con la información completa/correcta al momento de su conferencia, nunca debió saltar a conclusiones. ¿Tan difícil era investigar y descubrir verdaderamente a qué hacía referencia la vestimenta del tirador? ¿Tan difícil era guardarse las conjeturas y los prejuicios y esperar a que se tuvieran todos los datos?
La torpeza con la que ha sido reportado el caso ha provocado que su discusión se centre en el factor equivocado. No deberíamos estar debatiendo sobre si tal o cual medio provoca violencia (pero ahora tenemos qué, porque los medios han vuelto a reforzar esa idea). Muchos de nosotros estamos expuestos a productos de entretenimiento con contenido violento y consumirlos no nos lleva a matar porque sabemos cómo digerirlos, cómo analizarlos, cómo juzgar éticamente lo que representan. Tenemos voluntad y capacidad crítica, no somos marionetas de la TV, las consolas o los libros. No basta con jugar Natural Selection o leer sobre Columbine para llevar a cabo un tiroteo
¿Cuáles son las condiciones psicológicas que se requieren para que un niño de 11 años decida replicar una masacre escolar? ¿Cuáles son las condiciones sociales, familiares y culturales que aumentan la posibilidad de que eso ocurra? ¿Cómo podemos combatirlas? Esas son las preguntas que deberíamos estar intentando responder.
