“No se trata de borrar la reforma educativa, como quiere Morena, sino de mejorarla”

Especialistas en educación critican la propuesta de Movimiento de Regeneración Nacional de cancelar la reforma educativa. Hay puntos que mejorar,pero no debe desaparecer, advierten

A menos de tres semanas de que arrancaron los foros convocados por el próximo gobierno para discutir la reforma educativa, la bancada de Morena en la Cámara de Diputados siguió al pie de la letra la ruta marcada por el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para echar abajo la reforma promulgada en 2013.

Durante la sesión del martes 11 de septiembre, la Cámara de Diputados —con mayoría de Morena— aprobó un punto de acuerdo en el que exhortó a las autoridades educativas a suspender de manera inmediata e indefinida “los procesos de evaluación para el ingreso, promoción, reconocimiento y permanencia, así como cualquier procedimiento sancionatorio hasta en tanto sea revisado”.

¿Y los foros?

Aunque un día después, la Secretaría de Educación Pública (SEP) respondió a la Cámara de Diputados que “por mandato constitucional y legal, continuarán los procesos de evaluación docente”, el exhorto de Morena dejó claro que el meollo de la reforma es la evaluación a los maestros. “Ni siquiera han acabado los foros y ya está la conclusión de cuál va a ser el resultado de los foros, que es la derogación de la Reforma Educativa”, dijo Marco A. Fernández, coordinador de Anticorrupción y Educación en México Evalúa y profesor-investigador del Tecnológico de Monterrey.

Para David Calderón, presidente ejecutivo de Mexicanos Primero, la bancada de Morena tendría que tener al menos una alternativa a la reforma aprobada por el presidente Enrique Peña Nieto.

El presidente ejecutivo de Mexicanos Primero advierte que la cancelación o abrogación de la reforma podría generar una controversia constitucional. “No creo que el presidente electo se arriesgue a una controversia constitucional de cinco o seis estados que digan ‘oye, no podemos dejar de cumplir la ley vigente y la ley nueva no tiene amarres con lo anterior (…) y no puedo dejar de hacer las evaluaciones previstas en la ley hasta que haya una nueva ley'”.

Durante la exposición de motivos en el Pleno, el diputado Irán Santiago Manuel dijo que la reforma educativa es punitiva y privatizadora, por lo que “las maestras y maestros están siendo víctimas de un permanente acoso laboral, una supervisión excesiva, aumento en la carga de trabajo eminentemente administrativo que entorpece su labor”.

Las dudas sobre la privatización

Para Marco Fernández, las palabras del diputado Santiago Manuel revelan “una ligereza” en la materia e “ignorancia” en algunos puntos, como cuando el diputado morenista señaló que se vive “una privatización silenciosa del sistema educativo tal y como sucede con los comités de participación social en las que padres y madres de familia asumen los costos del mantenimiento de los planteles”.

“Es falso que la Reforma Educativa sea una reforma privatizadora a través de los consejos de participación social y la responsabilidad del mantenimiento de las escuelas por parte de los padres de familia. Me parece que eso no solamente exhibe ignorancia sino raya en la mentira, porque estas figuras existen desde 1992. Lo que han tratado de hacer, de manera no siempre exitosa, son estructuras en las escuelas para organizar a los padres de familia y que incentiven comunidades de aprendizaje en los propios planteles, nada qué ver con un intento privatizador de la educación, eso me parece no solamente falso sino mentiroso”, explica Marco Fernández.

BORRAR POR BORRAR

La falta de claridad sobre cuál es el plan B del próximo gobierno es motivo de preocupación para los especialistas. La principal crítica de Andrés Manuel López Obrador y de algunos legisladores como Martí Batres o Mario Delgado apunta a la evaluación docente que se estableció en la Reforma junto con el Servicio Profesional Docente. Durante la exposición del punto de acuerdo, el diputado Irán Santiago Manuel dijo que los maestros no se oponen a una evaluación formativa, sino a una “punitiva”.

Para el coordinador de México Evalúa, en el caso de la evaluación de ingreso y promoción se hizo correctamente, “tan es así que más bien el reclamo de los docentes es la insuficiencia de plazas y la resistencia de algunos estados por respetar el orden de prelación de los resultados de la evaluación”. Sobre la evaluación de desempeño, los especialistas tienen críticas puntuales, como que los maestros no han recibido la formación que se necesita.

David Calderón explica que hay un error de diseño en la evaluación de desempeño: “El maestro presenta un portafolio con un proyecto, lo que no me consta que lo hizo, hay un reporte de responsabilidades profesionales que debe hacer su director, si el director lo quiere fastidiar le baja, si lo quiere ayudar lo sube, quién controla eso. No hay voz de los padres, no hay voz de los niños. Finalmente llegan a un gran examen de muchas horas, poco pedagógico, en donde un tercio de las preguntas son de la normativa, si te sabes el reglamento, y pues es parte de la vida profesional pero claramente eso no te hace un mejor o peor maestro, y después preguntas genéricas sobre el plan de estudios. Entonces, tú lo que quieres ver es si el maestro está logrando el aprendizaje con los alumnos. El instrumento es inestable y poco confiable. Eso hay que cambiarlo ya”.

Texto: José Beltrán
Fotos: Cortesía

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.