Dirigente pesquero resalta que, tras agotarse esta pesquería, los hombres de mar optaron por depredar especies como langosta, pulpo y mero
La pesca furtiva es una de las grandes problemáticas que se viven en el estado de Yucatán y actualmente las especies amenazadas son tanto pulpo, langosta y mero; sin embargo, gran parte de la problemática del furtivismo se remonta hace una década cuando se inició la captura de pepino de mar, comentó José Luis Carrillo Galaz, presidente de la Confederación Mexicana de Cooperativas Pesqueras.
“El furtivismo en un gran problema y en Yucatán hay un antes y un después del pepino de mar. En el 2010 se abrió la temporada de pepino en el estado de manera formal y es un recurso con un valor muy bueno en el mercado asiático, muy por arriba de la langosta, del pulpo y del mero, lo que incentivó a que mucho pescador foráneo viniera a Yucatán y empezará a pescar el pepino de manera legal y de manera ilegal también”, recordó.
Carrillo Galaz explicó que la captura de pepino de mar comenzó a capitalizar a muchos pequeños permisionarios que empezaron a crecer de forma desordenada y ante la falta de mano de obra en Yucatán empezaron a traer a foráneos.
Pero al acabarse el pepino de mar, los pescadores se fueron sobre la langosta, sobre el pulpo y el mero y eso desató el problema que se tiene actualmente con la pesca furtiva en el estado, que está afectando ampliamente y gran parte se debe a la apertura del pepino de manera desordenada.
Actualmente la pesca del pepino de mar está en veda permanente y los ejemplares son menos, por lo que no se pretende abrir una temporada de esta especie.
“A estas alturas no hay el recurso, no hay el pepino de mar, abrir la temporada sería autorizar que se siga pescando clandestinamente y como no hay pepino irán a sacar lo que haya. Creo que no es conveniente abrir la temporada a excepción de que el Inapesca o el CRIP determinen que hay suficiente densidad, suficiente biomasa, pero desde la parte social ningún pescador ordenado quiere empezar esta pesquería”, expresó el entrevistado, quien dijo que así como el pepino fue muy depredado, así podría ocurrir con las importantes pesquerías actuales sobre todo con el pulpo.
Cabe mencionar que el Centro Regional de Investigación Pesquera (CRIP) realiza monitoreos constantes de la biomasa del pepino de mar y a pesar de la solicitud de abrir la temporada de captura, el dictamen del CRIP fue negativo ya que no hay el recurso.
Texto y foto: David Correa
