Jesús Medina se dedica a tocar en los municipios, pero por la pandemia ya no lo hace porque pertenece a grupo de riesgo, así que lleva meses encomendado con una samaritana, que ya no puede mantenerlo
Jesús Manuel Medina Pérez sueña con regresar al interior del estado y llevar música a los habitantes de algunos municipios como Oxkutzcab y Motul, donde acostumbraba a tocar, ya que desde hace 11 meses tuvo que guardar la guitarra, debido a la pandemia, ya que es una persona con riesgo de contraer covid-19.
Jesús relató para Peninsular Punto Medio que desde hace 5 años quedó ciego a raíz de la diabetes que padece, por lo que se le ocurrió llevar su música a varios municipios, ya que era una alternativa para poder sobrevivir, sin embargo, debido a la crisis actual tuvo que dejar las calles, lo que ha complicado su situación económica, ya que además tiene un soplo en el corazón, por lo que requiere dos medicamentos, que juntos tiene un valor de 3 mil pesos, que no puede pagar.
Comentó que hace tres años solicitó la pensión por discapacidad ante la Secretaría de Bienestar, pero no lo contemplaron en el padrón de beneficiados.
—También intentamos aplicar en los apoyos que dio el Gobierno del Estado, pero como la señora que me cuida no sabe de esas aplicaciones, no pude ingresar —dijo.
Resaltó que actualmente la persona que lo cuida, la señora Reina Cauich no se puede seguir haciendo cargo de él, ya que también se ha visto afectada por la pandemia, además de que no tiene el dinero para comprar los medicamentos que necesita cada mes.
—Hace dos meses estuve al bordo de la muerte, los médicos no me daban esperanza, por lo que decidí morirme en la casa donde vivo, con Reina, incluso mis hermanos se fueron a despedir de mí, pero gracias a los medicamentos que estoy tomando he podido salir adelante, pero cada vez es más difícil poder comprarlos —aseveró.
El entrevistado mencionó que actualmente los vecinos los apoyan regalándoles comida, o cooperan para poder completar para las medicinas.
Reina les comentó a los familiares, que ya no se puede hacer cargo de él, pero le han dicho que ellos tampoco, y que la mejor opción es que lo saque a la calle, y lo deje a su suerte, pero no tiene el corazón para hacerlo.
—Lo único que pido es que me ayuden a tramitar mi pensión, para no ser una carga para nadie, y pueda comprar mis medicamentos, y si Dios quiere cuando acabe la contingencia sanitaria volver a las calles para deleitar a la gente con mi música —expresó.
“Chucho” como le dicen sus amigos, es admirador de Vicente Fernández, por lo que la mayor parte de su repertorio son melodías del ícono de la música ranchera.
Por su parte, Julia Sosa, encargada del albergue Hogar Colitas Mid, quien fue la que difundió este caso, hizo un llamado a la sociedad a apoyar a Jesús para que pueda seguir tomando sus medicamentos, o ayudarlos ya sea con despensa, o participando en las dinámicas que en breve estará realizando a beneficio del músico.
—Estaremos haciendo rifas y vendiendo postres para poder comprar una olla exprés, que pueda servirle a Reina y a Jesús para que puedan vender tamales, y poder tener algo de ingresos — subrayó.
Para los interesados en ayudar al músico pueden acudir a su domicilio ubicado en la calle 155 B No. 268 x 58 A y 50 fraccionamiento Brisas de San José, o marcar al número 9994-51-77-41 o comunicarse con Julia Sosa en la página de Facebook Hogar Colitas Mid.
Texto y fotos: Georgina Bacelis
