El Ayuntamiento de Tizimín, a cargo del alcalde Mario González González, no da respuesta sobre la empresa encargada de otorgar la concesión del Sistema de Confinamiento Controlado de Basura
El relleno sanitario de X’Bohom, comisaría de Tizimín, se encuentra al borde del colapso, debido a la falta de atención adecuada, pues los desechos se siguen acumulando, lo que representan un riesgo de salud para la gente que vive cerca de ese lugar y comunidades aledañas.
A pesar de que este lugar se construyó hace una década para dar servicio a municipios como Calotmul, Panabá, Río Lagartos, San Felipe y Sucilá, únicamente recibe los desechos que se generan en Tizimín, pero actualmente la celda ha rebasado su capacidad.
A este problema se suma la falta de un manejo adecuado e incluso los propios trabajadores desconocen cuantas toneladas de desperdicios ingresan al día, ya que al parecer la báscula está descompuesta.
Incluso el encargado del relleno sanitario, Emilio Mijangos Calderón, le ha echado la culpa a la comunidad de que no exista una cultura de la clasificación de la basura, pues la gente llena una sola bolsa para colocar sus desperdicios.
Según se supo, los mismos trabajadores del relleno sanitario son los que se encargan de clasificar los plásticos y aluminios, no obstante, el sitio ha alcanzado varios metros de basura a la que no le está dando un buen manejo.
Cabe señalar que el pasado 10 de agosto de 2019 el Comité de Transparencia de Tizimín le solicitó al Ayuntamiento del alcalde Mario González González el contrato de la empresa que otorga la concesión del Sistema de Confinamiento Controlado de Basura (Relleno Sanitario), hasta el día de hoy la unidad de transparencia no ha entregado la información solicitada.
Ante la falta de respuesta, el comité instruyó a la Titular de la Unidad de Transparencia de ese municipio realizar la notificación correspondiente al solicitante, sin embargo, aún no han tenido respuesta.
Este relleno se construyó en 2011 durante el periodo de Ivonne Ortega Pacheco, y tuvo una inversión de 71 millones de pesos, sin embargo, este quedó a medias y fue hasta el año pasado que comenzó a funcionar.
Texto: Georgina Bacelis
Foto: Agencias
