En el marco de la inauguración del Festival Internacional Cervantino, el público guanajuatense presencia el estreno en México del espectáculo “A passage to Bollywood”
En los últimos años se han fortalecido la idea que el Bollywood, la industria cinematográfica india, se convirtió en la más importante del mundo y los números así lo confirman. La prensa europea, por ejemplo, cifra en casi 2 mil películas al año, mientras que los medios americanos calculan que son alrededor 800.
Sus temáticas son universales, el amor, la amistad, la familia, la superación personal, todo cabe en el Bollywood. Incluso aquellos temas que no son comunes para todo el mundo pero que en India son un tabú como la problemática de la defecación al aire libre o la necesidad de que las mujeres puedan usar toallas limpias durante su menstruación.
El poder del Bollywood no recae en los temas que aborda ni en su estratoférica numeralia, ni siquiera en las historias acerca de cómo sus artistas, actores y bailarines, son celebridades que convocan a millones de niños y jóvenes; su fortaleza es ser una ventana a la tradición india y a su capacidad de fundir una cultura milenaria con la contemporaneidad.
La 46 edición del Festival Internacional Cervantino se inauguró la noche del miércoles en la Alhóndiga de Granaditas con el estreno en México de “A passage to Bollywood” (Un pasaje a Bollywood), coreografía montada y dirigida por Ashley Lobo para ser interpretada por su propia compañía, The Danceworx | Navdhara India Dance Theatre.
El tema central de esta representación es el amor, y la pregunta de qué tan lejos podemos llegar para hacer realidad un sueño. En palabras del propio Lobo, es una historia de ficción que se basa en el sueño de cada niño de una aldea de ir a la gran ciudad y tener éxito. Pero las aspiraciones y los sueños, nos dice este espectáculo, tienen un precio que se puede cobrar con la vida misma.
“A passage to Bollywood” se convierte en una referencia, es un bocado indio gracias a su música, al colorido vestuario, cuyas trajes son tejidos completamente a mano, y cuenta con símbolos mundialmente conocidos como Ganesha, una de las deidades más veneradas por los hindús.
Es, como su nombre lo indica, un pasaje a una forma de comprender el mundo desde la tradición, pero también desde el mundo actual.
Texto y foto: El Universal
