Con la implementación del plan para combatir el huachicoleo, que ha dejado en desabasto de gasolinas a varios estados, “no podemos medir si la medicina es más cara que la enfermedad”, afirmó el senador de la República, Jorge Carlos Ramírez Marín.
En entrevista en el Congreso del Estado, donde acudió a la entrega del reconocimiento “Dip. Pánfilo Novelo Martín”, Ramírez Marín dijo que respalda el combate a ese flagelo que ha emprendido el actual gobierno federal, pero que no comparte las consecuencias, como es el desabasto de combustibles.
–Es una estrategia muy riesgosa, el problema con la administración federal actual es que tiene la tendencia a pensar que la realidad cambia con lo que nos dicen. Que lo que digan basta para cambiar las cosas. Claro que hay menos robos de pipas, pero también mucho menos abasto de combustibles–señaló.
Puso como ejemplo del desabasto, que en Michoacán hay reportes de que las patrullas ya no circulan en las calles y municipios por falta de combustible, lo que es terrible por la inseguridad que hay en ese estado.
–No sabemos si el daño está resultando mayor o menor que los beneficios, pero cuando escucho que en Michoacán ya no circulan las patrullas, pues concluyo que el daño es mayor–dijo.
Para Ramírez Marín, la administración de Andrés Manuel López Obrador tiene todo su apoyo en el combate a ese flagelo.
–Tiene toda la razón y tiene mi apoyo completo para combatir lo que se ha convertido en un flagelo de la sociedad, no sólo de Pemex, porque el hecho que haya pueblos completos robando gasolina es una amenaza para la seguridad del país, así es que tiene razón–afirmó el senador yucateco.
Hasta ayer, en más de 10 estados había desabasto, incluidas algunas gasolineras en la Ciudad de México y el Estado de México, pero ese problema todavía no llega a Yucatán.
Texto y foto: Esteban Cruz Obando
