El objetivo de la restauración es consolidar a ese sitio como un destino turístico, junto con el cenote y el parador
Kikil. En una visita a esa comunidad, personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y de la Arquidiócesis de Yucatán confirmaron que están dispuestos a sumar esfuerzos con el gobierno y ciudadanos de esta comunidad para rescatar el ex convento y la iglesia que se encuentran en esta población.
Aprovechando la gira de trabajo, recorrieron las instalaciones para determinar qué partes de la misma se pueden rescatar y las que requieran ser atendidas con prioridad para evitar posibles accidentes a los visitantes.
La iniciativa del rescate es de un grupo de 16 habitantes de esta población, encabezados por Luis Trejo Cervera, quien explicó que el objetivo es que la gente de la población pueda aprovechar el paso de los turistas para ofrecerles artesanías y otros productos que entre ellos mismos elaboren con piedras o algún otro material propio de la región.
Hasta el momento captan la atención del turismo con diversas piezas antiguas que resguardan en el museo del ex convento, pero consideran que es necesario seguir trabajando en busca de consolidar a esta comunidad como un destino turístico junto con el cenote y el parador turístico que ya se encuentra en funciones.
Antonio Bojórquez Carvajal, director técnico de la Comisión de Bienes Eclesiásticos y Arte Sacro de la Arquidiócesis de Yucatán, indicó que lo primero será retirar la maleza y algunos pequeños árboles que han crecido en la parte alta de la iglesia, así como buscar la manera de evitar que las iguanas permanezcan en ella y sigan deteriorando la estructura.
En el recorrido estuvo la regidora de Educación, Cultura, Deporte y Turismo, Shelina Osorio Ramírez, y la coordinadora de Turismo del ayuntamiento, Patricia Cardeña, quienes escucharon los agradecimientos de los integrantes de la asociación civil por el respaldo que han recibido de la Comuna.
Texto y foto: Isauro Chi
