Se ahogan las escuelas particulares

Las cargas tributarias ponen en jaque a las escuelas particulares de la entidad, principalmente a las de mayor antigüedad y tradición, lo que ha generado ahora tres perfiles: las escuelas públicas, las privadas y las comerciales.

Mientras las escuelas de la iniciativa privada parecen estar muriendo una a una, el arribo de planteles desde otros puntos del país se dispara en la entidad, de acuerdo con el Sistema Interactivo de Consulta de Estadística Educativa de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Ante los impuestos impagables, varios colegios locales han tenido que cerrar, uno de los últimos fue el Hispano Mexicano, situación que ha sido aprovechada por los consorcios que han comprado escuelas que ya no pueden costear los impuestos, con lo que ponen en riesgo la calidad educativa.

El Colegio “Avelino Montes Linaje”, en su nivel preparatoria, recientemente también cerró sus puertas, así como otras que incluso han sido absorbidas por consorcios que ahora masifican la educación.

Sobre el tema, el presidente de la Asociación Mexicana de Escuelas Particulares en Yucatán, Elías Dájer Fadel, informó que las cargas tributarias están ahogando a las escuelas de la iniciativa privada que fueron fundadas por personas con interés legítimo de educación.

-Lo que estamos viendo ahora es que hay escuelas que están cerrando. Escuelas que son de tradición y muy antiguas en la ciudad, y muchas de ellas están siendo compradas, y siguen operando pero ya no con la misma dirección. Mientras que muchos se esfuerzan por una atención personalizada, con salones de no más de 20 estudiantes, en estos colegios encuentras hasta 50 alumnos en un solo salón -dijo.

Según el Sicee de la SEP, desde el 2010 se ha registrado en Yucatán un altibajo en la oferta educativa privada local, y por ciclo escolar algunas escuelas desaparecen mientras otras llegan, pero la matrícula global de estudiantes de las escuelas de paga, registra desde ese año un crecimiento sostenido.
En el ciclo escolar 2010-2011, en Yucatán se tenía respecto a escuelas de educación básica, que comprende el nivel preescolar, primaria y secundaria, un total de 552 centros escolares, prestando un servicio para 40 mil 892 menores.

Años más tarde, en el ciclo escolar 2013-2014 se llegó a la cifra de 578 escuelas privadas del nivel básico, con 44 mil 568 alumnos matriculados en los planteles, es decir, un crecimiento de 26 nuevas escuelas y de tres mil 676 nuevos estudiantes.

Pero para el ciclo escolar último en actualización, 2017-2018, el número de colegios privados de educación básica en el Estado llegó a 590 planteles, que representan 12 escuelas más, con 49 mil 665 alumnos, que son poco más de cinco mil nuevos estudiantes.

Al respecto, Dájer Fadel recordó que existe una doble carga tributaria para las escuelas particulares, ya que en 2014 a través de la Ley de Impuesto Sobre la Renta se contó con un gravamen a las escuelas de la iniciativa privada de un 35 por ciento.

Por ende, existen ahora escuelas que están “batallando” para sobrevivir ante la carga tributaria, la mayoría de ellas son de años de experiencias, mientras que otras se desconoce la calidad educativa que tienen.

Actualmente en esta agrupación de escuelas particulares figuran unos 240 planteles de nivel desde preescolar y guarderías, hasta preparatorias, y a esto se estiman unos 24 mil estudiantes en los planteles distribuidos en la entidad, pero principalmente en Mérida.

Cabe mencionar que hasta antes de los ciclos mencionados, la entidad mantenía un crecimiento “lento” en la oferta educativa privada, e incluso, la tendencia mostraba que cada vez había menos escuelas privadas en esta localidad.

En los ciclos 2008-2009, 2009-2010 y 2010-2012, la entidad mostró un sostenimiento en la oferta de escuelas de la iniciativa privada y la matrícula estudiantil que la conformaban, al registrarse un crecimiento de cinco, y dos escuelas en esos tres ciclos escolares, con aumento de alumnos de menos de mil estudiantes.

Sobre este fenómeno, Dájer Fadel destacó que los padres de familia deben analizar el lugar donde llevan a estudiar a sus hijos, y exhortó a buscar opciones de tradición comprobada, en donde se tiene un vínculo estrecho con los directivos del centro escolar.

-Contrario a lo que refleja esa estadística, nosotros en la federación de escuelas particulares registramos el año pasado un decremento en nuestra matrícula que aún no terminamos de calcular. Pero una de las razones puede ser porque los papás están buscando ahora escuelas más baratas en términos económicos -manifestó.

Texto: Iván Duarte
Fotos: Cortesía

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