Sentimiento independentista de Yucatán viene de su primera Constitución Política

De siempre nos hemos reconocido  los yucatecos con un sentimiento independentista, de lo nuestro, de libertad, de no plegarnos al Centro; precisamente esa fue una premisa que se marcó en la Primera Constitución de Yucatán, promulgada en 1825, y en la que se estableció que “la República de Yucatán sería popular, representativa y federada en la República de México”.

Un 23 de abril, pero de 1824, toma posesión del Gobierno del Estado el licenciado Francisco Antonio Tarrazo, nombrado por el primer Congreso Constituyente, el mismo que en 1825 juró la primera Constitución Política de Yucatán.

Esa Carta Magna fue aprobada el 6 de abril de 1825, y aunque fue jurada y nunca entró en vigor, vale la pena revisar su contenido para determinar sus alcances, sobre todo para la época en la que se promulgó.

Solo la palabra “República” daba a entender que, aunque estaríamos ligados a México por la vía del federalismo, los yucatecos seríamos una nación independiente. Lógicamente nunca entró en vigor pues dos golpes centralistas le quitaron a Yucatán su soberanía.

Incluyendo la que nos rige, Yucatán ha tenido cinco Constituciones Políticas y antes de la primera, ya con el triunfo de la Guerra de Independencia, se expidió un decreto para adoptar transitoriamente la Constitución de Cádiz, promulgada el 19 de marzo de 1812 en España.

En su camino histórico, como describí líneas arriba, Yucatán ha tenido Constituciones en 1825, 1841, 1850, 1862 y la última y vigente, la de 1918, que el año pasado cumplió cien años y fue celebrada con varios festejos por ese onomástico.

La de 1825 cobra importancia por ser la primera y resultado de la Guerra de Independencia del Reino de España, una conflagración que comenzó en 1810, cuando el cura Miguel Hidalgo y Costilla llamó a las armas en Dolores, Hidalgo.

Como República de Yucatán, aunque debemos entender que nunca fue implementada como tal, se abarcó los actuales estados mexicanos de Campeche, Quintana Roo y Yucatán (la integridad de la porción mexicana de la Península de Yucatán), los que en tiempos de la dominación española habían constituido gran parte de la Capitanía General de Yucatán.

Yucatán se unió a la Federación mexicana como República Federada de Yucatán​ el 29 de mayo de 1823; sin embargo, fue hasta el 23 de diciembre de 1823 cuando se le admitió como estado de la Federación. Se independizó en 1842​ naciendo así la denominada segunda “República de Yucatán” y se reintegró definitivamente a la nación en 1848.

Generalmente al hablar de la República de Yucatán se hace referencia a la segunda época que fue de 1840 a 1848. Durante este período se dio una separación de facto entre el estado de Yucatán y la República Mexicana.

Uno de los logros más importantes en este periodo del legislador yucateco fue redactar una de las constituciones más avanzadas de su tiempo, aunque no se llegó a aplicar, la Constitución de Yucatán de 1841, emplea desde aquella época términos y conceptos aún vigentes: las garantías individuales, la libertad religiosa y la figura jurídica del amparo.

Texto: Esteban Cruz Obando
Imagen: Archivo

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