RENÉ EMIR BUENFIL VIERA
psicrenebuenfil@gmail.com
Noviembre es el mes de la concientización de la diabetes, y en México y en Yucatán tenemos cuentas pendientes con esta población que hoy, en plena pandemia, es considerada de alto riesgo.
Y lo digo con conocimiento de causa; en mi consultorio de psicología recibo cotidianamente a personas que viven con diabetes y escucho sus preocupaciones, miedos y angustias a partir de que reciben este diagnóstico que le da un giro de 180° a su salud mental, ya que una de las grandes preocupaciones, sobre todo en cuanto pacientes con diabetes tipo 1, que necesitan inyectarse insulina diariamente para sobrevivir, es el dinero.
Tener diabetes requiere un cambio de hábitos alimenticios, de actividad física y de medicamentos si se quieren evitar las complicaciones derivadas de esta condición de vida, y por desgracia el Sector Salud hoy en día no otorga un tratamiento completo para estas personas, por lo tanto, les es más difícil cuidarse, y necesitan invertir dinero de su propia bolsa para poder monitorear sus niveles de glucosa en sangre.
Es por eso que las personas y profesionales de la salud que trabajamos con ellas estamos buscando de distintas formas hacer visible esta realidad, ya sea a través del hashtag que titula este artículo creado por Julissa Rolón en Guadalajara, usando el círculo azul que es el símbolo del #díamundialdeladiabetes en la ropa o en redes sociales, o difundiendo datos estadísticos como que por cada persona diagnosticada con diabetes en el mundo, hay dos que tienen diabetes pero todavía no lo saben.
Algunas personas aceptan su diabetes y en seguida toman cartas en el asunto, pero muchas otras viven un proceso de duelo por la pérdida de la salud, ahí es donde la labor del psicólogo(a) es importante, ya que puedes tener los(as) mejores doctores(as) pero si no aceptas tu enfermedad, si estás en negación y haces como si no pasara nada, si estás enojado(a) o deprimido(a) por esta noticia, lo más probable es que no te cuides ni te atiendas adecuadamente, y más cuando hay muchos mitos sobre la salud que te lo impiden: “de algo me voy a morir, mejor disfruto la vida y como lo que quiera” o “tengo diabetes, ya no puedo comer azúcar”; estas son algunas creencias que nos perjudican a la hora de tomar decisiones asertivas de autocuidado y nos ponen en riesgo.
Si vives con diabetes o alguien en tu familia tiene diabetes, un tema central es la educación sobre la enfermedad, ya que las mejores decisiones son las que se toman informadas, mientras más sepas sobre esta condición de vida la podrás manejar mejor y vivir con un buen porcentaje de tiempo en rango.
Estas y otras metas de tratamiento requieren un equipo de profesionales de la salud que va desde endocrinólogos(as) y otros(as) doctores(as), nutriólogas(os), activadores(as) físicos, y en este año, la Federación Internacional de Diabetes IDF recalca la labor de enfermeras(os) como primer contacto de los pacientes con la educación en diabetes. Por último, cabe mencionar que las columnas de este mes de #PsicologíaEnPunto seguirán dedicadas a este tema.
