VALLADOLID.– Alan, un pequeño de 11 años, manifestó que debido a su precaria situación económica, se vio en la necesidad de andar en la calle vendiendo diferentes productos de fritangas y ganarse unos pesos, con los que ayuda en la economía de su casa.
Alan, un niño con muchas ganas de salir adelante, con esa sed imparable de lograr sus objetivos de ser alguien en la vida para poder tener una vida digna para él y sus padres.
Pese a la situación de mucha carencia que vive él está con mucho ímpetu para lograr todo.
Hoy Alan se las ingenió para lograr trabajar y de esta forma ganarse unos pesos y así poder ayudar a solventar gastos en su casa y costear sus estudios.
–Me gustaría hacer cosas que otros amigos hacen, pero me hace falta el dinero –indicó.
El pequeño es buen estudiante y también agradeció a sus padres y a Dios por lo que tiene.
Alan tiene 11 años de edad estudia sexto grado de primaria, todas las tardes vende chicharrones en un pequeño canasto frente la iglesia de San Servacio. “Me gusta también ayudar con el gasto”, finalizó.
Edmundo Hernández Armas
