Yucatán ocupa el último lugar en el tratamiento de aguas residuales al registrarse 100 centímetros cúbicos por segundo por cada mil personas, cifra por debajo de la media nacional que es de 1.10 litros por segundo, denunció Humberto Reyes Montiel, integrante de Ciudadanos Hartos Asociación Civil (Chac). “Ni una coquita”, dijo.
En un resumen de las acciones a realizar durante los próximos años en contra del “agua podrida de Mérida”, como lo han llamado, Reyes Montiel platicó con Peninsular Punto Medio. Recordó que el movimiento de concientización ya cumplió dos años, tiempo que han tocado decenas de puertas estatales y municipales.
Muchos han sido los temas señalados. En este balance de acciones hizo mención del tratamiento de aguas residuales, pero también la disposición de los residuos.
En el 10 % de las localidades de Yucatán se obtuvo una disposición de 28 % de los desechos, ubicando al estado por debajo de la media nacional. Se encuentra en el lugar 29 entre las entidades con mayor número de localidades.
Aprovechó para mostrar inconformidad por la actitud del Gobierno Estatal quien anunció trabajo de monitoreo de contaminación del agua, ya que señaló, ese trabajo ya está hecho desde hace 10 años.
“Hay mucha chamba para enero. Le vamos a decir que no monitoree, no empiecen a descubrir el hilo negro, este monitoreo empezó en 2010, se tienen todo de cómo fue avanzando. Ahí está, está documentado”, expuso.
Reyes Montiel consideró la idea de que las autoridades piensen que los temas relacionados con la contaminación están agotados, pero dijo contar con información avalada por investigadores que va a usar de tal forma que se mantenga viva la acción de visibilización.
“Si se sigue trabajando, si empiezan con una Ley y un presupuesto modesto, pero constante, si empiezan en el 2024 podemos limpiar el manto freático para el 2036. Son 12 años de limpieza. Espero podamos triunfar todos y lograr que autoridades, opinión pública esté lista en el 2024. No se puede menos, es de 10 a 15 años”, indicó.
Adelantó que durante el 2020 y 2021 se trabajará en una anticampaña durante el proceso electoral, señalando la situación que existe. También se pondrá en marcha un Observatorio Científico Ciudadano del Agua.
Texto y foto: Jesús Gómez
