La tranquilidad del Paseo de Montejo fue interrumpida la tarde-noche de ayer por unas bestias mitológicas que se apoderaron de una de las vías más representativas de la ciudad.
La gente que transitaba por esa zona dejó todo lo que hacía para acercarse y ver qué pasaba, porque las niñas lloraban del susto y algunos niños gritaban “toma una foto, toma una foto”.
Desde lejos, los “dragones” escupían fuego al cielo, conforme transitaban el calor incrementaba y la desilusión se presentaba al ver que eran las canastas con los quemadores de propano.
Ailed Correa en compañía de su hija Yoyled se trasladó de Kanasín para ver el desfile. En su mente tuvo el concepto de ver algo colorido y carros alegóricos con dragones.
“No lo puedo creer, fue más sencillo de lo que me esperaba. Pensé que iba a ser algo más impresionante para los niños”, comentó la madre de familia que acudió a la cita por una tarea de su hija, de 2 años de edad, quien curso la educación no escolarizada.
Dianela Moreno supuso que el desfile de los “dragones” conseguiría el mismo nivel de convocatoria que los carnavales realizados. “Esperaba algo colorido, ver a los dragones, no algo feo”.
Mayra Balam, vecina del Centro, opinó lo contrario. “Es algo muy atractivo que no se había visto en Mérida. Cuando llegué (al Paseo de Montejo) me esperaba ver algo relacionado con la Semana de la Cultura China, no una actividad de El Globo”.
Sin embargo, el pequeño Liam dijo ver a los “dragones” que salieron del monumento a la patria.
–Irbin Flores Palomino
