Además de la gente que con atuendos extravagantes abarrotaba los escenarios del Electric Daisy Carnival en lasLas Vegas, eran las banderas de diferentes países las que también resaltaban.
Brasil, Estados Unidos, Japón y Cuba fueron algunos de los presentes a la fiesta de música electrónica en la que DJ’s como Captain Hook, Claude VonStroke y Don Diablo no dejaron en ningún momento que ningún asistente descansara entre una noche llena de música, luces y pirotecnia.
A kilómetros de distancia de México y con Las Vegas Motor Speedway como escenario, la presencia nacional no podía faltar.
Entre el público había desde un hombre con máscara de luchador hasta otro que con orgullo portaba un traje de charro o un cartel con la cara de Itatí Cantoral como Soraya, que rondaba el evento.
El clásico lema “¡Viva México, cantones!”, también estuvo presente en banderas y pancartas.
El público mexicano tuvo de todo: hubo quienes llegaron en grandes grupos para vivir la experiencia como uno en el que todos definieron vestirse como los Power Rangers, acompañados por elementos mexicanos como sobreros y el peluche de un Chile.
Los fans de la música electrónica posaban para las fotografías a la entrada del área Daisy Lane y venían de estados como Monterrey y Mérida.
Fuera de las manos. El clima le jugó una mala pasada a los asistentes del Festival EDC. En su segundo día de actividades en el que artistas como Martin Garrix, Tiesto y Kaskade recibieron el aclamo del público, la experiencia se complicó.
A causa de los fuertes vientos que se presentaron, instalaciones como el escenario Quantum Valley tuvieron que ser suspendidas. La instalación Cloud control, hecha con grandes pelotas que brillaban, también fue cerrada.
“Salgan por favor, es por seguridad, está haciendo mucho viento”, comentó uno de los encargados de vigilar la entrada de Quantum Valley a la que alrededor de las dos de la mañana le colocaron una cinta amarilla.
“Estamos experimentando altos vientos y como precaución hemos cerrado algunos escenarios”, explicaron de manera oficial los organizadores.
“Estamos monitoreando la situación pero no estamos evaluando el lugar”, dijeron.
Sin embargo al viento no le bastó para arruinar la experiencia de los miles de asistentes que llenaron la explanada del estadio.
Además de la mala jugada del clima, algunos asistentes que se pasearon por las zonas de juegos, comida y conciertos, sufrieron el robo de cartera y celular durante los momentos de mayor afluencia de gente.
Texto y foto: El Universal
