El senador de la República, Jorge Carlos Ramírez Marín, lamentó la división que se vive entre la dirigencia del tricolor en Yucatán y los diputados locales, tras la votación a favor del Paquete Fiscal del 2020, por lo que consideró “que es una pena que estemos divididos”.
Sin embargo, expresó que el distanciamiento es producto de una confrontación propiciada por la falta de comunicación y de una molestia ante lo que ellos (los diputados) consideran una traición, porque no tuvieron oportunidad de definir una estrategia formalmente con su dirigente.
“Me da mucha pena que estemos divididos y estemos más cerca de una división mayor que de un entendimiento”, recalcó.
Sobre los nuevos impuestos, el legislador federal dijo que no conoce los detalles, pero siempre será polémico el tema.
“A ellos y a la gente del gobierno con la que he hablado les he explicado que comprendiendo la necesidad no me parece que sean los yucatecos los que tengan que pagar más. Por otro lado me preocupa mucho la estructura legal de los impuestos. No me parece que esté realmente sólida la base jurídica en el caso del de seguridad y el aumento del 3 al 5 a los hoteleros afecta la competitividad del estado”, señaló.
Lo que tiene claro, indicó, es que por intervención de los diputados del PRI es que en las zonas rurales prácticamente no serán afectadas.
Ramírez Marín hizo un llamado a las partes para limar asperezas, a serenarse, para que no se ahonden las diferencias.
“Seguramente podríamos encontrar errores en la actuación de ambas partes, pero lo más importante es hacer evaluaciones, no descalificaciones”, concluyó.
Tras la votación del miércoles, nueve de los 10 diputado del tricolor pidieron la renuncia de Francisco Torres Rivas, al que calificaron que no tiene palabra y ayer “Panchito” dijo que con la época navideña se acabarán los problemas.
Texto: Esteban Cruz Obando
Fotos: Cortesía
