Roberto Dorantes
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El inicio de la vida cristiana comienza con el bautismo, este se realiza en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu santo, esta fórmula revela el misterio de la Santísima Trinidad.
La trinidad es una verdad revelada desde el inicio de la Iglesia, es decir, desde los tiempos apostólicos, como podemos ver en la segunda carta del apóstol Pablo a la Iglesia de los Corintios: “La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios Padre y la comunión del Espíritu Santo sea con vosotros” (2Co. 13,13).
Siempre he insistido en la relación que se da entre la filosofía y la teología, a esta relación la llamo sinergia, coadyuvante, la ciencia humana no puede estar en contradicción con la ciencia divina, la inteligencia humana con la inteligencia de Dios no son adversas sino amigas.
Ejemplo de esto es la formulación del dogma trinitario, aclaro antes que nada, que nos encontramos ante un misterio, esto es una verdad infinitamente más allá del todo lo que podamos concebir según la mente humana. Los misterios confirman la divinidad de la revelación, porque por sí sólo el hombre no puede concebir las verdades reveladas.
Los términos de “substancia”, “esencia” o “naturaleza”, se utilizan para designar al ser divino en su unidad; el término “persona” o “hipóstasis” para designar al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo en su distinción real entre sí; el término “relación” para designar el hecho de que su distinción reside en la referencia de cada uno a los otros.
Cada persona se le atribuye una acción específica, así conocemos que la acción del Padre es la creación, la del Hijo la redención y la del Espíritu Santo la santificación de las almas en la Iglesia.
La Santísima Trinidad es el misterio central de la fe y de la vida cristiana. Misterio de Dios mismo, fuente de todos los otros misterios de la fe. Enseñanza más fundamental y esencial en la jerarquía de las verdades de fe.
La confesión de fe de todo cristiano se cimenta en la Santísima Trinidad, (Fides ómnium christianorum in Trinitate consistit. S. Cesáreo de Arlés).
