La primavera llegó y Kin fue puntual a la cita. El templo de las siete muñecas de Dzibilchaltún se iluminó. El espectáculo arqueo-astronómico dio inicio ante la mirada de más de mil 800 personas de la entidad y de otras latitudes que vivieron, algunos por primera vez, la sabiduría de la cultura maya.
En el equinoccio de primavera y otoño se puede disfrutar de la misma cantidad de horas luz que de oscuridad. Durante el evento el sol sale de manera exacta por el este, conocimiento adquirido por los mayas.
Minutos antes del fenómeno, uno a uno, en parejas o grupos: niños, jóvenes y adultos de la entidad y de otras latitudes, llegaron para presenciar este fenómeno que marca el inicio de la primavera.
Las nubes parecían no dar tregua, pero Kin se impuso y resurgió más brillante que nunca, momento que fue capturado a través de fotos y vídeos por los asistentes. Algunos aprovecharon para cargarse de energía e iniciar con buena vibra esta nueva etapa marcada por los mayas.
Aunque el espectáculo en el centro ceremonial tardó pocos minutos, los asistentes se dijeron maravillados. En realidad uno puede quedarse más tiempo para contemplar la precisión.
“Estuvo muy bonito, es una experiencia que tienes que vivirla en carne propia”, declaró Abigail Ortiz de la Ciudad de México, durante su primera visita a la zona arqueológica, la cual dijo no sería la última.
Por su parte, Cristián Jesús García Herrera, estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), calificó el evento como un fenómeno “increíble”, en el que se muestra cómo la cultura maya hace su arquitectura basándose en los astros. “Es una fenomenología increíble que sin duda todos los mexicanos estamos orgullosos”.
Operativo
Según datos proporcionados por el director de Patronato Cultur, Mauricio Díaz Montalvo, durante el equinoccio de primavera en esta zona arqueológica se tuvo la asistencia de mil 800 personas, un incremento del 50% con respecto al 2018, con dos pequeños accidentes.
—El clima nos ayudó bastante, se vio en todo en esplendor. Tuvimos dos pequeños incidentes: un esguince y una cortada con una piedra, lo normal que sucede en esta zona ya que se pueden subir en algunas partes —dijo. En el operativo se contó con elementos de la SSP, la Policía Federal y Cultur.
Texto: Jesús Gómez
Foto: Amílcar Rodríguez
