Durante muchos años hemos leído y escuchado noticias relacionadas con los accidentes en carretera y como estos cada año cobran la vida de cientos de personas en Yucatán. Sin embargo, la mayoría hemos sido indolentes ante este tipo de estadísticas y simplemente las olvidamos o las dejamos pasar.
Nunca hacemos realmente caso a las recomendaciones de las autoridades y todos los días vemos percances relacionado a los mismos vicios de siempre: el exceso de velocidad y el uso de distractores.
Creo que todos sabemos perfectamente qué es lo que debemos y no hacer en nuestros vehículos: ponernos el cinturón de seguridad, no usar el celular, manejar a las velocidades indicadas y no hacerlo en estado de ebriedad. Teniendo nuestros cinco sentidos en el volante y nuestro entorno, podemos reducir la posibilidad de sufrir algún accidente en carretera.
Es cierto que las autoridades deben ejercer una agresiva campaña mediática para recordar a todos los riesgos y el peligro que sufrimos por no manejar correctamente, pero también es verdad que somos nosotros como ciudadanos conscientes los que debemos valorar que al usar el celular o distraerse al manejar, ponemos en riesgo no solo nuestra vida, sino también la de otros, incluyendo nuestra propia familia.
