A un año de iniciar su cargo como gobernador, Mauricio Vila Dosal genera certeza y traza rumbos claros hacia el segundo año de su mandato.
Eso, al menos, puede inferirse de las opiniones de distintos expertos que Punto Medio consultó para hacer un corte de las acciones de su administración y llevar a cabo un análisis sencillo que permita entender, de la manera más concreta posible, cómo va este Gobierno.
Ciertamente, no todos los balances son positivos. En el tema medioambiental se han llevado a cabo acciones contundentes; sin embargo, hace falta seguir trabajando ante el crítico panorama en el cual se dejó al agua y a los ecosistemas yucatecos, recursos invaluables que viven amenazados por un crecimiento desordenado e inconsciente.
Por demás, Vila Dosal entrega claramente buenas cuentas en otros rubros como la economía, la administración y el manejo de las fuerzas políticas en el estado.
Así, mientras Juan José Abraham Dáguer celebra que nunca existió la tan negativa curva de aprendizaje, otros, como Ana Rosa Payán, reconocen la cercanía que ha sabido forjar con el presidente Andrés Manuel López Obrador, una que deberá rendir buenos frutos.
A un año de aquella tarde lluviosa en el Teatro Peón Contreras, muchos son aún los cambios pendientes para el gobernador yucateco.
Pese a esto, con mucho tiempo por delante, la esperanza sigue intacta gracias a realidades que, desde aquel primero de octubre, Vila Dosal empezó a construir no bien salió de aquella ceremonia.
