Estas esculturas de personajes gorditos y con un rostro sin rasgos característicos de alguna cultura en particular, se han robado la atención de los meridanos y yucatecos, que no han dejado pasar la oportunidad de tomarse la foto del recuerdo, primero en el Centro Internacional de Congresos, donde se instaló una de estas figuras de tamaño monumental, la del piloto sobre un avioncito de papel, y desde hace unos días en el Pasaje de la Revolución.
“Se llaman Timoteos, Timo para los cuates”, dijo a Punto Medio su creador, el escultor mexicano Rodrigo de la Sierra, quien a través de estos personajes comparte con el público sus reflexiones acerca de la dualidad del ser humano, donde Timo es la parte tangible y Teo, la parte ideal, sutil, intangible, representada por una aspiración emocional, un deseo, una ambición, un miedo o una frustración.
Previo a la inauguración de la muestra “Timo mirando al Sureste”, que estará disponible hasta el 31 de enero en el Museo de Arte Contemporáneo de Yucatán Fernando García Ponce “Macay”, De la Sierra explicó que su personaje nació como una crítica personal apuntando a los clichés y a los absurdos de la vida cotidiana.
“El primer Timo, era diferente, era un vocero más duro, físicamente era más delgado, alargado y con pelo, pero poco a poco me di cuenta que tenía una personalidad definida y empatía con el público a través de un discurso crítico que apuntaba a una pequeña observación, y entonces su imagen cambió dejando en claro que Timo es actitud. Las cosas se hacen, no se dicen, ese es su discurso” explica el escultor, quien destaca que por abordar temas que afectan de raíz a la sociedad en general, sus esculturas se identifican lo mismo con hombres o mujeres que con cualquier ciudadano del mundo, por lo que sin problema alguno ha expuesto en Japón, Italia, Estados Unidos, Canadá y en varios estados de la República Mexicana.
En el Pasaje de la Revolución se exhiben cinco piezas monumentales, en el lobby una de mediano formato, además de dos instalaciones y varias piezas de tamaño mediano, con lo que son en total 19 las piezas que estarán en exhibición. En total hay 300 en el mundo.
“Se trata de una complicación de obras tanto por fecha de ejecución como por temática, una exposición estructurada y planeada que la gente la va a disfrutar al ver el concepto del personaje de manera más clara”, subrayó el entrevistado, quien concluye que uno de los mensajes que intenta compartir con el público es que la vida es demasiada seria para tomarla en serio.
“Hay que tomarla con un toque de ironía y reírnos de nosotros mismos”, concluyó.
Texto y fotos: Manuel Pool Moguel
