Masculinidad y rastrillos

Por Gerardo Novelo

ASUMO YA SE HABRÁN ENTERADO DE “WE BELIEVE: THE BEST MEN WE CAN BE”, el comercial de Gillette que nos pide analizar lo que entendemos como masculinidad, y de la enorme polémica a su alrededor.

No escribo para aplaudir ni defender a Gillette. No es más que una empresa explotando un movimiento social para fines publicitarios; un poco más mesurado, pero no muy diferente, a cuando Kendall Jenner nos aseguró que tomando una Pepsi podríamos erradicar el racismo. No es como si la empresa fuese inocente del impuesto rosa o de remitir a roles de género en otras campañas.

Esta columna va, entonces, para analizar las reacciones en torno al comercial y cómo éstas demuestran lo necesario que es enfrentar la masculinidad tóxica.

No, el comercial no sugiere que todos los hombres son violentos ni que todo lo masculino es malo. Al contrario.

En menos de dos minutos vemos hombres virtuosos y valientes, incluyendo a un ídolo personal, Terry Crews, diciendo que “los hombres tenemos que rendirnos cuentas entre nosotros”.

¿Cómo puede alguien pensar que el comercial dice que todos los hombres son acosadores, cuando en el mismo vemos a un hombre frenando el acoso de su amigo? ¿Cómo pueden pensar que dice que todos los hombres son violentos, cuando en el mismo vemos a un padre enseñándole a su hijo que a golpes no se resuelven las cosas? Se ven reflejados solo en los que son el problema y desconocen de hombría a los otros.

Así que: ¿por qué hay hombres que se identifican con esas conductas destructivas, al punto de que ven la alternativa como un ataque a su masculinidad?

Hablar de masculinidad tóxica no es decir que toda masculinidad es tóxica, de la misma forma que hablar de comida podrida no es sugerir que toda la comida está podrida. En cambio, se refiere a comportamientos y expectativas destructivas que hemos asociado con la masculinidad y que nos urge deshacernos. Si sientes que el comercial de Gillette representa un ataque a tu masculinidad, imploro: necesitas seriamente replantearte qué significa para ti ser hombre.

Parafraseando al siempre relevante Existential Comics: si quieres ser más masculino, pregúntate; “¿que haría Aragorn?” Justicia, honor, lealtad, respeto, humildad y poner tu compromiso con la sociedad por encima de ti mismo. Nótese que “berrinchear sobre corrección política en redes sociales por horas” no está en la lista (sí, también podríamos reemplazar “más masculino” por “más maduro” y deshacernos por completo de expectativas de género, pero una cosa a la vez, ¿va?).

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.