Por: Carol Santana Franco
A estas alturas, parece que casi todo Yucatán se ha enterado de la existencia de la cuenta de Twitter “MeTooMérida” y de los alcances que llegó a tener. La semana pasada todos los medios publicaron el ascenso y la caída de esta cuenta, las denuncias y las repercusiones que las denuncias exhibidas causaron entre las personas o la persona detrás de este user y los denunciados.
La rapidez con el que se popularizó esta cuenta y sus denuncias quizá habla más del morbo de la sociedad que de un interés genuino por hacer que las cosas cambien, así como que el acoso y las agresiones dejen de formar parte de nuestro día a día. Y aunque el #MeTooMérida inició conversaciones muy importantes, también generó muchas dudas, miedos y mitos que si bien no podemos resolver del todo, si podemos ir desmenuzando poco a poco.
¿Por qué denunciaron hasta ahora?
Por más charlas, artes marciales y avisos que recibamos, la realidad es que nunca estamos del todo preparados para recibir una agresión sexual, así como tampoco sabemos cómo vamos a reaccionar ni cómo nos vamos a sentir. Muchas de las historias no son recientes porque cuesta muchísimo procesarlas. Y para nada es fácil poder decirlas en voz alta, querer recordarlas o contarlas, aunque sea vía mensaje.
Pero ¿por qué no denunciaron a la policía?
En muchos casos, lo intentaron, pero su denuncia no procedió. Y existen muchos factores además de la corrupción que sabemos es parte de nuestro sistema judicial, por ejemplo, no todas las personas que trabajan en las instituciones están preparadas para llevar casos de violencia sexual. Existe la revictimización y la falta de conocimiento que todos los matices de la violencia puede generar, una violación no siempre “parece” una violación.
A veces sucede con amigos, novios e inició como una relación consensuada. Parte de lo que hace dudar a las víctimas de denunciar es la culpa y la vergüenza de lo que van a pensar los demás, en especial cuando hemos visto una y otra vez que todavía nos falta entender como sociedad que las mujeres no van por la vida queriendo ser violadas, ni por la ropa, o el alcohol que hayan consumido.
¿Y las denuncias falsas?
Las mujeres NO ganan nada de denunciar una agresión. No reciben un premio, no les dan dinero, no se vuelven populares, ni famosas, etc. Tenemos que dejar el discurso telenovelero de que las malas mujeres van a usar esta arma contra los hombres buenos para arruinarles la vida.
Pero de esto hablaremos más a fondo la próxima semana.
