Las votaciones en torno a la consulta referente a la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México fue uno de los temas más recurrentes para los meridanos, que desde temprana hora se preguntaban dónde y cómo podrían sufragar, mientras que otros mostraban orgullosos la imagen de su dedo manchado con tinta indeleble en redes sociales; sin embargo, otros consideraron que hacen falta garantías de que no se influirá con malas prácticas en los resultados.
Carlos Lara, vecino del rumbo de Xcalachén, dijo que el mecanismo carece de validez porque consultan a cualquier persona sin tener conocimientos del tema.
–¿Qué le puede importar a los yucatecos que nunca hemos ido a la capital en avión, y que creo que ni vamos a ir, como es mi caso?–dijo el entrevistado, quien consideró que solo servirá para que el próximo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se lave las manos argumentando que fue la gente la que tomó la decisión si las cosas no salen como se espera.
Por su parte, María Rodríguez Moguel comentó a Punto Medio, que le parece bien que se consulte a la gente, pero que en todo caso no debió de ser tan generalizado el asunto, y que los que debieron emitir sus consideraciones en torno a esta situación y votar son los hombres de negocios, que de manera constante viajan a la capital del país, como los integrantes de las cámaras empresariales, que son los que se benefician o perjudican con una mala decisión tomada.
José Luis Castillo consideró que tener un aeropuerto en la zona de Texcoco es algo que resultará perjudicial, económicamente hablando, para quienes necesitan viajar a la Ciudad de México. Explicó que en su caso requiere de tomar un taxi para llegar a su hotel, que le cobra 300 pesos.
–Me imagino qué nos pasará. Vamos a tener que pagar cantidades fuertísimas de transporte en taxi para trasladarnos del nuevo aeropuerto a donde acostumbramos ir, entonces llegará un momento en el que a pesar de que el costo de los vuelos sea hasta cierto punto barato por las promociones, resulte mejor ir en camión, para no pagar tanto en traslado– comentó el entrevistado.
Ante esta situación, también opinó la coordinadora de la fracción parlamentaria de Movimiento Ciudadano en el Congreso del Estado, Silvia López Escoffié, quien dijo que la consulta popular sobre el NAIM no cumple con la difusión adecuada y no puede considerarse como un ejercicio verdaderamente democrático.
La diputada informó que la consulta popular que se realizó en diversos puntos del país no tiene ningún sustento jurídico y vinculatorio, y que tampoco cumple con una difusión completa de las características de las opciones existentes con respecto la realización de la obra, por lo tanto, quienes participen en este ejercicio lo harán con información insuficiente y limitada.
-Aunque ya se está llevando a cabo la consulta todavía existen dudas respecto a los criterios utilizados para la definición de los sitios en los que se instalarán las mesas receptoras de información, y también hacen falta garantías para asegurar que no se recurrirá a malas prácticas como el acarreo, la duplicidad de participación o el recuento inexacto de votos, ya que no existe claridad de quienes serán las personas responsables de cada mesa– subrayó.
La diputada local consideró que esta consulta es una simulación, ya que al existir un total desconocimiento del adecuado procedimiento para hacer consultas públicas, se debió involucrar el pleno de las instituciones que se han construido para garantizar la participación de la ciudadanía como lo es el Instituto Nacional Electoral.
-La participación democrática es uno de los objetivos de Movimiento Ciudadano, ya que en la medida en la que la sociedad se involucre de manera más activa y directa en las decisiones del país avanzaremos en la erradicación de prácticas que desacrediten a nuestras instituciones, como el Poder Legislativo y Judicial– concluyó.
Texto: Manuel Pool Moguel
Fotos: Juliana Sepúlveda
