Por Carlos Hornelas
Una de las cosas que más escamoteamos a los políticos es que la mayoría de las veces no cumplen lo que prometen. No obstante, cuando se empeñan en cumplir a toda costa lo que prometieron en campaña, uno simplemente no sabe qué es peor.
Donald Trump ha amedrentado con cerrar nuevamente el gobierno si los demócratas no autorizan los fondos para financiar el muro prometido a su base electoral. Ha recurrido a un recurso legal que le permite declarar emergencia y esquivar la autorización del Congreso. Con miras al 2020 y un posible nuevo período, el presidente lo juega todo para incrementar su apreciación como cumplidor a toda costa.
En México no cantamos mal las rancheras con el presidente López Obrador quien, en marzo del año pasado, en plena campaña prometió hacer de las Islas Marías un paraíso Turístico. Algo así como lo que pasó con la prisión de Alcatraz, que se decía era inexpugnable.
Si por decreto se clausura la única prisión con muros de agua en México, con tal de cumplir una promesa de campaña, ¿sería más o menos benéfico para el pueblo bueno? Resulta que es el único penal en el cual la Comisión Nacional de Derechos Humanos no ha emitido ninguna resolución y en el caso de los reos que cumplen su sentencia, dado el ambiente en el cual se desenvuelven, al purgar su condena se ha detectado que son más ampliamente proclives a una reinserción exitosa en la sociedad. No es un modelo de readaptación social, pero dadas las condiciones del resto es digno de mencionarse.
Recordemos el año pasado en el cual los motines y las purgas internas demostraron la fragilidad del modelo penitenciario en nuestro país.
No obstante, ahora se piensa mudar a los condenados en las Islas Marías a penales que sufren de sobrepoblación y en algunos casos con un autogobierno cuestionable. Si esto vale cumplir una promesa, adelante.
En nuestro Estado los pescadores están valorando hoy por hoy las promesas del otrora candidato a gobernador quien les habría prometido en campaña despensas y a cambio, han recibido solamente bolsas de frijol, y como diría un clásico, en algunos casos presumiblemente con gorgojo.
Reza un conocido refrán “prometer no empobrece: dar es lo que aniquila”. Habiendo otras muchas promesas que cumplir como hacer grande al país de nuevo, acabar con la corrupción o cualesquiera otras ¿Por qué precisamente elegir éstas?
Un saludo especial a Melissa Paredes, Melissa Puerto, Hernán Cárdenas, Karla Matos y Regina Barrena quienes hoy nos representan en la Organización de Estados Americanos en Washington DC en el DiploHack 2019. Son un orgullo para sus padres y sus profesores. Enhorabuena.
